Jesús Vázquez
CANCÚN, Q. Roo
Apretarse el cinturón, ahorrar en la medida de lo posible y recurrir al crédito bancario únicamente en caso necesario son las recomendaciones para enfrentar la situación que se avecina en México derivado de la depreciación del peso frente al dólar y la escalada inflacionaria que esto supone.
Es al menos como lo visualiza Eloy Peniche Ruiz, dirigente de Coparmex en Cancún, quien concedió una entrevista exclusiva a Quintana Roo Hoy para hablar de la situación actual de las empresas y lo que esperan con el cambio de gobierno a nivel estatal.
“Estamos en una coyuntura de tener que ahorrar no sólo las empresas, sino también las personas, tenemos que hacer una mejor selección de nuestras necesidades y compras. Olvidarnos de gastos innecesarios, adquirir lo estrictamente necesario; las empresas checar los gastos y controlarlos, incrementar la fuerza de ventas, buscar la manera de innovar y ante todo incrementar la rentabilidad de nuestros negocios”.
El líder patronal considera que este tipo de medidas son las mínimas necesarias para enfrentar “los tiempos difíciles que se nos van a venir encima”.
Dada la situación de incertidumbre financiera, el crédito debe ser la última opción a la que debería recurrir una empresa, siempre y cuando “el dinero se emplee en inversión productiva y no en el gasto de operación”, advierte.
En el ámbito macroeconómico, Peniche Ruiz alerta sobre los riesgos que representan para México seguir importando bienes de consumo en lugar de importar bienes de capital. Los bienes de consumo, explica, nos hacen más dependientes de otras economías, en cambio los bienes de capital nos permitirían generar empresas transformar y producir valor para convertirnos nosotros en exportadores y revertir el impacto que está teniendo la devaluación de nuestra moneda.
Expectativas sobre el nuevo gobierno
Para el dirigente de Coparmex, el nuevo gobierno estatal debe marcar un antes y un después en transparencia y control del gasto.
“El gobierno tiene que poner el ejemplo en ese sentido; tienen que cuidar que los recursos que no se vayan en gasto operativo y superfluo, sino que se vaya a actividades productivas, como mayor y mejor infraestructura para el desarrollo del estado”.
Peniche Ruiz recuerda que Coparmex fue una de las impulsoras de las malogradas leyes de transparencia, por lo que pondrán especial en la rendición de cuentas que prometió aplicar el nuevo gobierno cuando recurrió a ellos para solicitarles el voto.
“Se deberá cuidar de no malgastar desde gasolina hasta en número de funcionarios. No tener demasiada gente contratada que no tenga un fin determinado, hay que optimizar los recursos en ese sentido, que se haga con el mismo dinero mucho más obra”.
Lista de buenos deseos
“Esperamos que haya un cambio para bien. Se deben sentar las bases para un para el desarrollo productivo. Que los empresarios tengamos las facilidades necesarias para estar operando y que seamos productivos, que la simplificación administrativa se aplique, y que dejemos atrás los rezados dentro de todo el armatoste burocrático. Debe modernizarse la parte estatal y municipal, meterle mucha tecnología a los trámites”.
Para las empresas, Peniche Ruiz espera que el nuevo sexenio implique un cambio radical que desregule todo lo relacionado a licencias y permisos, y se agilice de manera importante la apertura de nuevos negocios, así como la renovación de licencias y demás trámites de gobierno.
Recordó que hoy en día Quintana Roo se encuentra en los últimos lugares de competitividad empresarial, precisamente por los tiempos excesivos que toma abrir una empresa en el estado.
Habló también de la certidumbre jurídica que se le debe dar a las empresas y recordó casos como los de Tajamar, en donde dijo que debe imponerse en estado de derecho si ya se ha comprobado que Fonatur cumplió con todas las condicionantes de la ley.
Panorama laboral
En este rubro, el líder patronal anticipa que hay una buena expectativa para Quintana Roo, basado en el buen rumbo que ha tomado la industria turística, pero sobre todo porque históricamente la entidad ha sido una de las generadoras de empleo más importantes de todo el país.
Sin embargo, advierte que el panorama laboral es cada vez más competido, lo cual requerirá de personal con mejor capacitación.
“Existe la generación de fuentes de empleo, pero no estamos encontrando a la gente adecuada para esas plazas. Llega mucha gente de muchos lados, que no tiene ni la secundaria terminada”. Reconoció que una de las causas son las escasas opciones para realizar estudios profesionales en Quintana Roo, sin embargo, la opción para atender esta falta de personal es traer gente del centro o el norte del país.
Inseguridad
“Estamos muy preocupados, se vienen sucediendo una serie de hechos delictivos que no nos prenden los foso rojos porque ya los tenemos prendidos, pero cada vez nos preocupan un poco más”.
Peniche Ruiz asegura que éste es quizá el rubro en el que las actuales autoridades, pero sobre todo los gobiernos entrantes a nivel estatal y municipal deberán trabajar mucho más, puesto que en cualquier momento la delincuencia y la violencia se pueden salir de las manos como ya ha sucedido en Acapulco.
“No todo es responsabilidad de las autoridades, sino de la sociedad civil. Hay muchas veces que ni siquiera conocemos a nuestros vecinos. De alguna manera debemos ir tomando más conciencia. Organizarnos, conocernos e implementar nuestras propias medidas de seguridad”, expone.
¿Deuda manejable?
“Es ineludible que la enorme deuda del estado está ahí. Dependiendo cómo estén contratados los créditos, deberá tener margen de maniobra el nuevo gobierno. Lo que es un hecho es que debemos ser cuidadosos en cuanto al costo de la deuda, buscar los esquemas financieros para ir amortizando esta deuda”.
Peniche Ruiz aconseja echar mano de todos esos programas federales que existen pero que no son aprovechados ni a nivel municipal ni a nivel estatal. “Se deben gestionar esos recursos para gestionar la infraestructura y que los recursos estatales se destinen al pago de la deuda”, recomendó.
