CRISTINA ESCUDERO
GRUPO CANTÓN
CANCÚN.- Pone el pie Carlos Joaquín González, para que la Secretaría de Turismo (Sectur) no coloque sus oficinas en la Megaescultura de la bahía de Chetumal, también conocida como Torre del Mestizaje, ya que de acuerdo a su titular, Miguel Torruco Marqués, el gobierno del estado no tiene los permisos en regla y no se ha podido proceder al contrato de comodato para licitar su acondicionamiento.
El secretario de Turismo subió hoy un tuit con fotos del monumento, en el que dice en forma clara las razones por las que no se han mudado a Chetumal, como es la indicación de Andrés Manuel López Obrador: “La descentralización de las oficinas de SECTUR en la Torre del Mestizaje en Chetumal, será cuando el gobierno del Estado tenga los permisos en regla y así proceder al contrato de comodato para licitar su acondicionamiento. Ello ha impedido por 14 años concesionar también su cafetería. “
Ciudadanos molestos por esta situación cuestionan al mandatario quintanarroense por estar obstaculizando la llegada de Sectur a Chetumal como el caso de Miriam Arelli Pool, quien a través de redes sociales afirmó: “salió peor que sus antecesores, cero obra pública en su gobierno, toda la lana se la robó”. La indignación se justifica porque el gobernador, a unos días de dar su informe, por simples trámites burocráticos, no ha llegado esta inversión necesaria, sobre todo en estos tiempos de pandemia.
Carlos Joaquín se suma a la misma estela de corrupción que se ha realizado con esta construcción. Desde el 2004 la población chetumaleña ha esperado la apertura de este edificio en el que distintas administraciones han invertido más de 260 millones de pesos, pero hasta la fecha no ha abierto sus puertas al público y aunque el actual gobernador prometió que el lugar dejaría de ser un elefante blanco, no ha sido así.
La esperanza era que con la llegada de la Sectur el monumento se activara; sin embargo, dicho traslado de las oficinas sigue pendiente por la opacidad del gobierno de Carlos Joaquín y hoy en día se mantiene en ruinas, pues una parte de la estructura de las fuentes danzarinas del Monumento al Mestizaje Mexicano en Chetumal, se encuentran en el suelo de lo que en su momento fue nombrado como un “ícono de la ciudad”.
En cuatro años de gobierno Carlos Joaquín no ha hecho nada por poner en regla la Torre del Mestizaje e incluso sus funcionarios se la han pasado dando falsas esperanzas a los ciudadanos como lo hizo Marisol Vanegas Pérez, titular de la Secretaría Estatal de Turismo (Sedetur), quien declaró en entrevistas anteriores que “esa obra sería todo un ícono en la ciudad, y la espera por muchos años de la población será completamente remunerada con proyectos de calidad, que seguramente aportarán a la oferta turística de Chetumal”.
De acuerdo a Carlos Joaquín, su gobierno prometió que el Monumento al Mestizaje Mexicano en Chetumal contaría con una ciclopista, acceso al mirador y parador fotográfico que se colocará en la entrada, además de videomapping, museografía y proyecciones en 3D y 4D, todo completamente falso, ya que actualmente hasta se encuentra cerrado y sin vigilancia, demostrando su poco interés porque las oficinas de Sectur lleguen a instalarse ahí como parte del proyecto de descentralización de las dependencias federales, implementado por el gobierno federal.
La obra señalada en su momento como un “Monumento a la Corrupción” inició en 2004 durante el gobierno de Joaquín Hendricks Díaz, e inicialmente fue contemplada como una megaescultura del artista plástico mexicano Enrique Carbajal González, mejor conocido Sebastián. En el sexenio de Félix González Canto se pretendió revivir el proyecto, pero sólo consiguió completar con pequeñas esculturas un corredor en la Bahía, con un costo de 40 millones de pesos.
En la administración de Roberto Borge Angulo, se destinaron tres millones de pesos para el mantenimiento de la obra que presentaba un deterioro importante, pero nadie sabe en qué se invirtió el dinero porque el Monumento continuó igual, sin embargo, en 2015 se anunció el rescate de la estructura para convertirla en el Museo Cuna del Mestizaje, el cual recibiría una inversión de 100 millones de pesos provenientes de recursos federales, que tampoco se sabe a dónde fueron a parar.
Llegado el sexenio del actual gobernador Carlos Joaquín González, el proyecto tuvo que ser detenido ya que el escultor Sebastián interpuso un recurso legal por las modificaciones que sufrió su obra, razón por la cual, el gobierno del estado proyectó el pago de 72 millones de pesos al artista (30% del costo total de la obra) como indemnización, además de los 40 millones presupuestados para su culminación.
Desde el año pasado que se anunció que la dependencia estaría en Chetumal, el gobierno estatal se ha dado a la tarea de retrasar el proyecto, ya que ni siquiera han regularizado el uso de suelo, la gran excusa de este año es la pandemia para poner en regla los permisos del lugar, cuando en realidad es un tema por el que Carlos Joaquín debería apostar ya que Quintana Roo vive del turismo y contar con la sede de Sectur en el estado vendría a mejorar la actividad en materia de promoción turística del país.