Jazmín Ramos
CANCÚN, Q. Roo
Durante la contingencia por lluvias en el municipio de Benito Juárez, las acciones de ayuda oficial, no contemplan a las colonias irregulares, por lo que unos 200 mil habitantes, son relegados de la asistencia, bajo el argumento de vivir en zona no municipalizadas.
En esta jurisdicción se tiene un promedio de 80 asentamientos irregulares, de los cuales el 50% carecen de servicios de infraestructura urbana y social, además la mayoría de las casas son de cartón y palapa, por lo tanto durante las precipitaciones pluviales, los vientos levanten la laminas e incluso tiran las endebles viviendas.
Asimismo, al no haber drenaje las calles de terracería se reblandecen con la acumulación del agua generando lodo, lo cual impide el tránsito y se generan criaderos naturales de moscos en los charcos, situación que expone a los residentes a sufrir enfermedades.
También, los habitantes de esa zona suele colgar “diablitos” para obtener el fluido eléctrico, de modo que los vientos provocados por las lluvias tiran el cableado, cuando esto sucede, los afectados buscan volver a colgarlos en los cables de alta tensión, situación que los vulnera a ser electrocutados.
Sin embargo, pese a las dificultades que provocan las precipitaciones pluviales, las autoridades no pueden auxiliar a la población, por ser zona no municipalizada.
En el caso de una contingencia, primero se privilegia la zona hotelera, después la zona urbana y si hay tiempo mandan alguna brigada a los asentamientos irregulares.
Ante ello el propio secretario del Ayuntamiento, José de la Peña Ruiz de Chávez, admitió, que no hay personal para auxiliar a las personas que habitan en las zonas irregulares, dado que se privilegian a la población que vive en colonias municipalizadas.