Jazmín Ramos
CANCÚN, Q. Roo
Comprar en “abonos chiquitos” al final es un duro golpe a las finanzas familiares, pues con ello se triplica el precio real del producto, alertó el asesor financiero Roberto Acuña Farías, quien dijo que comprar a crédito con pagos mínimos al final se convierte en una bola de nieve.
Mencionó que, los créditos al consumo más caros que existen, son aquellos que ofrecen abonos bajos, pues esto permite a quienes otorgan esas líneas financieras aumentar hasta tres veces el valor del producto.
Ante ello, ejemplificó con un electrodoméstico que al contado cuesta 4 mil pesos, pero al fraccionarse el costo mediante un sistema de pago se termina desembolsando hasta 16 mil pesos, pues a esto se le suman intereses, los cuales varían según el plazo asignado.
Mencionó que, es muy común que los consumidores se dejen seducir por estas promociones y ofertas de “paga poquito y llévatelo a casa”, pero esto implica pagar más e incluso hay casos en donde ni siquiera terminan de liquidar el bien y al final los embargan.
Acuña Farías, dijo que lo más recomendable es que los consumidores ahorren y compren de contado, para ello se pueden fijar metas de reserva, con ello se invertirá menos, además no se corre el riesgo que por falta de pagos se pierda el producto adquirido.
“La más viable es no comprar en abonos y ahorrar el costo total de bien que se desea adquirir, de esta forma se evita el endeudamiento y se fomenta la cultura de guardar el dinero para un fin determinado”.