CIUDAD DE MÉXICO.- Carlos Romero Deschamps, el líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), pertenece al PRI desde 1969. Ha sido legislador por el tricolor en seis ocasiones, y detenta la titularidad del gremio petrolero desde 1996. En el año 2000, “aportó” 1 mil 500 millones de pesos –de las arcas sindicales– a la campaña del priísta Francisco Labastida Ochoa… quien perdió.
Fiel soldado del partido que le ha garantizado fuero desde el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, ahora el secretario general del STPRM y actual senador, trató de inclinar el voto petrolero a favor de José Antonio Meade, candidato a la Presidencia de la República por la coalición Todo por México (PRI-PVEM-Panal)… pero le falló la jugada.
Así trató Romero Deschamps de operar el voto corporativo, de acuerdo a los testimonios recabados por Grupo Cantón. Ahora gran parte del gremio petrolero pide su salida.
VOTO MASIVO
Desde que arrancó la campaña electoral por la Presidencia de la República, la orden de Carlos Romero Deschamps a sus 36 líderes sindicales seccionales fue la misma: voto masivo para el candidato del PRI, José Antonio Meade Kuribreña.
Co esa encomienda, cada uno de los 36 líderes seccionales hicieron el llamado al voto por el PRI a cada uno de sus trabajadores agremiados.
Y no sólo eso, pues les solicitaron también que cada uno de ellos les pasara una lista de diez personas que también se comprometían a darle su sufragio a Meade, acompañada de copias fotostáticas de la credencial del INE de cada una de esas personas.
Los dirigentes se cuidaron de no dar la orden por escrito. “No son tontos, y trataron de no dejar evidencias de su llamado al voto corporativo. Pero eso sí, nos amenazaron de manera velada de que si llegaba López Obrador a la Presidencia, nuestros logros sindicales se terminarían. Nada más que nunca pensaron que votaríamos por el candidato tabasqueño, pues estamos hartos de tanta corrupción, sobre todo de nuestros dizque líderes”, refiere el ingeniero petrolero Juan Francisco Hernández, del STPRM.
Y apenas en días pasados, al confirmarse la victoria de AMLO como Presidente de la República, Romero Deschamps mandó publicar un desplegado donde dice asumir “con absoluto compromiso”, la decisión de los ciudadanos que eligieron al tabasqueño como sucesor de Enrique Peña Nieto. Aún más: dijo que respetará su investidura y le deseó una administración exitosa.
Y es que antes, en Veracruz, López Obrador sentenció, ante un nutrido grupo de petroleros que, de llegar a la Presidencia, acabaría con el cacicazgo en el sindicato de ese sector.
De nada le valieron a Romero Deschamps las amenazas y amagos para que los petroleros se volcaran a las urnas y votaran por el PRI. Ahora todo indica que su fin como líder está cerca…
David Casco Sosa
Grupo Cantón