Redacción / Grupo Cantón
Moscú exige elecciones, fin de la ley marcial y referendos territoriales para avanzar hacia la paz; Kiev rechaza cualquier cesión.
Rusia.- Desde China, al finalizar una visita oficial, el presidente ruso Vladimir Putin declaró estar dispuesto a reunirse con su homólogo ucraniano Volodímir Zelenski, si este acepta viajar a Moscú. Sin embargo, el líder del Kremlin cuestionó la utilidad de una reunión, al señalar que solo tendría sentido si estuviera bien preparada y generara “resultados tangibles”.
“En cuanto a una reunión con Zelenski, nunca he descartado la posibilidad. Pero ¿tiene sentido? Ya veremos”, afirmó Putin, al tiempo que expresó un tenue optimismo: “Creo que hay una luz al final del túnel”.
La postura rusa llega mientras el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha intensificado sus esfuerzos por lograr un encuentro directo entre los dos mandatarios, con el objetivo de negociar un posible acuerdo de paz.
Tensiones, condiciones y avances militares
Putin insistió en que para avanzar hacia la paz, Ucrania debería levantar la ley marcial, celebrar elecciones y organizar referendos sobre cuestiones territoriales. Estas propuestas han sido rechazadas de forma reiterada por Kiev y la comunidad internacional, que consideran las anexiones rusas como ilegales y los referendos como “simulacros sin legitimidad democrática”.
En septiembre y octubre de 2022, Moscú proclamó la anexión de las regiones ucranianas de Donetsk, Luhansk, Jersón y Zaporiyia, consolidando su exigencia de que cualquier negociación futura parta del reconocimiento de estas “nuevas realidades”.
Mientras tanto, las fuerzas rusas continúan avanzando en todos los frentes, según declaró el propio Putin.
Trump presiona por una reunión
Desde Washington, Trump ha expresado su interés por forzar un cara a cara entre Putin y Zelenski, buscando una victoria diplomática en un contexto donde las condiciones previas de ambas partes se mantienen como obstáculos insalvables.
Kiev exige la retirada total de las fuerzas rusas y la recuperación de su integridad territorial, mientras Moscú insiste en consolidar territorialmente sus ocupaciones.
El escenario actual sigue sin ofrecer señales claras de una negociación cercana, pero el aparente giro retórico de Putin abre una pequeña puerta al diálogo, aún con fuertes reservas.
