La Paz, Bolivia.- Una marcha de pobladores de Senkata, vecinos de El Alto y familias de las ocho personas fallecidas el martes durante enfrentamiento en la planta de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), que intentaba ingresar al centro de La Paz fue dispersada con gas por la Policía.
La movilización buscaba llegar a la sede de Gobierno para exigir justicia y la renuncia de la autoproclamada Presidenta, Jeanine Áñez. Al frente de la marcha iban algunas camionetas con los féretros de los ocho fallecidos el martes.
Los manifestantes colocaron uno de los féretros sobre un tanque militar, al que una persona se subió y ondeó la whipala (bandera usada por etnias de los Andes).
a movilización intentó romper el cerco de seguridad y por momentos lo logró, hasta que los efectivos militares comenzaron a lanzar los gases lacrimógenos. Tras el gas lacrimógeno se reportaron mujeres desmayadas y otras personas heridas. Personas ajenas a la manifestación habrían resultado también afectadas.