La primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, lanzó ayer un discurso que buscó distender los desacuerdos en el primer día de la Convención Nacional Demócrata, y al mismo tiempo marcar una diferencia clara entre Hillary Clinton y el candidato republicano Donald Trump.
Obama dejó en claro que Clinton es la persona mejor calificada para gobernar Estados Unidos por varias razones, entre ellas porque ha pasado la vida defendiendo a los niños discapacitados, luchando por la atención a la salud.
Luego, en clara referencia a los protestas por lo que seguidores de Bernie Sanders llaman traición del Partido Demócrata, dijo que cuando Hillary Clinton no ganó la nominación, precisamente frente a Barack Obama, “ella no se enojó, ni se desilusionó. Ella no empacó sus maletas y se fue a casa”.
Al contrario, agregó, ella se ofreció para servir como secretaria de Estado. “Ella nunca se da por vencida ante presiones. Para ella el camino fácil no es el que tomará, y nunca se ha rendido en nada de lo que ha hecho en la vida.
“Y como yo pienso en el tipo de presidente que quiero para mis niñas, alguien capaz de perseverar, de entender que los problemas que enfrenta un presidente no son en blanco y negro, no se puede reducir a 140 letras (en referencia al Twitter y Trump)”.
Obama dijo que ella quiere un presidente con record de servicio público. “Yo quiero un presidente que les enseñará nuestros niños que todos en este país importan, que todos hemos sido criados iguales. Yo sé que ese es el tipo de presidenta que será Hillary Clinton, y por eso yo estoy con ella”.
Dijo que líderes como Hillary Clinton tienen “las agallas de seguir regresando para levantarnos a todos con ella. Esa es la historia de este país, la historia que me ha traído a este escenario. Generaciones que sintieron la segregación pero siguieron luchando. Eso es lo que hicieron para hoy yo todos los días me despierte en una casa que fue construida por esclavos negros”.
“Por Hillary Clinton todas nuestras hijas pueden dar por sentado que una mujer puede ser presidenta de Estados Unidos. No dejen que les digan que este país no es grande. Este es el país más poderoso del mundo”, expresó.
“En estas elecciones no nos podemos sentar y decir que todo funcione bien”, dijo.
Y llamó a los demócratas de aquí a noviembre a hacer lo que hicieron hace 4 y hace ocho años. “Tenemos que verter toda la fortaleza y amor por este país para elegir a Hillary Clinton como presidenta de Estados Unidos”, concluyó.
Información: LSR
