CIUDAD DE MÉXICO.
Aunque su vida está en China, Rachel teme volver a ese país debido a la epidemia de infecciones por el nuevo coronavirus.
Ella viajó a México para visitar a su familia durante las vacaciones por el Año Nuevo Chino. Hasta el momento, sus empleadores le dicen que debe retomar sus actividades el 17 de febrero, porque no hay una indicación del gobierno para interrumpir las labores.
“Claro que temo volver pero mi jefe dice que mientras no haya un anuncio oficial, tenemos que regresar. Tengo amigos a los que sus empleadores les enviaron mensajes diciéndoles que no regresen a China hasta que ellos lo indiquen, pero no les van a pagar”, asegura a Excélsior Rachel, quien pidió ocultar su nombre real por temor a represalias del gobierno del país asiático.
En México se puso vacunas y tomó tratamientos recomendados por un neumólogo. Ella y su marido han gastado unos 10 mil pesos para fortalecer su organismo. En sus maletas llevarán también una dotación de cubrebocas especiales y medicamentos difíciles de conseguir en China.
“Me vacuné contra la neumonía, influenza A y B. Me pondré un tratamiento de factor de transferencia y otra vacuna en gotas para fortalecer el sistema inmunológico. Mi neumólogo me dio recetas para poder llevar medicamentos en caso de que nos enfermemos”, relata la mexicana a través de WhatsApp.
Explica que los tratamientos no son contra el nuevo coronavirus, pero esperan que los protejan de infecciones y fortalezcan sus defensas, como el caso del factor de transferencia, un extracto dializado de leucocitos que estimulan el sistema inmunitario.
“Ya sabemos que estas vacunas no son para el coronavirus, pero, como nos dijo el neumólogo, algo protege. Nos vacunamos justo el día que llegamos a México, el 9 de enero, pero no pensamos que se iba a poner así de crítico”, comparte vía WhatsApp.
Si ella pudiera, no regresaría a China, aunque allá ha hecho su vida los últimos seis años.
“Pero como tenemos un perrito, igual y sólo regresamos por él”.
Vía Excelsior