El deporte tiene la gran capacidad de beneficiar a las personas de manera directa o indirecta. Por si no lo creen, la historia del atleta Piotr Malachowski y cómo sacrificó su logro en Río 2016 para salvar la vida de un niño, les ayudará a hacerlo.
En la prueba de lanzamiento de disco, el deportista polaco ganó la medalla de plata al colocar su círculo a 67.55 metros, 82 centímetros por debajo del alemán Cristoph Harting.
Pero Malachowski no llegó a su casa a colgar la presea junto a la que ganó, del mismo tipo de metal, en Beijing 2008. El atleta de 33 años prefirió donarla para poder pagar el tratamiento de cáncer de un niño y hacer un llamado a que la gente apoyara la causa.
Olek Szymanski, compatriota de Piotr, padece un tipo de cáncer de ojo llamado retinoblastoma que afecta a los menores de edad. Con el donativo del atleta y de las personas que vieron su mensaje en Facebook, el infante de tres años pudo viajar a Nueva York para empezar su tratamiento.
Información: Sopitas