Jalalabad.- Al menos 20 personas murieron este sábado cuando un kamikaze hizo estallar su carga en medio de una multitud de talibanes, miembros de las fuerzas de seguridad y civiles que celebraban un inédito alto al fuego, informaron responsables afganos.
Al menos otras 16 personas resultaron heridas en el ataque, que se produjo en el distrito de Rodat, en la provincia oriental de Nangarhar, según el portavoz del gobernador provincial, Attaullah Khogyani.
El atentado no fue reivindicado por el momento, pero una fuente de seguridad afgana afirmó a la AFP que el grupo yihadista Estado Islámico (EI) era el responsable.
Se trata del primer atentado desde la entrada en vigor, el viernes, de un alto el fuego de tres días anunciado por los talibanes en ocasión del fin del Ramadán.
Por su parte, las fuerzas gubernamentales decretaron un alto el fuego desde el pasado martes de ocho días respecto a los talibanes.
El ataque se produjo poco antes de que el presidente afgano, Ashraf Ghani, anunciara la prolongación del alto el fuego gubernamental y pidiera a los talibanes que hicieran lo propio.
“Anuncio una prolongación del alto el fuego” más allá de la fecha prevista, declaró, precisando que se publicarían los detalles del mismo más adelante. “Le pido también a los talibanes que prolonguen su alto el fuego”, que debía terminar el domingo.
El cese de los combates dio lugar, el viernes y el sábado, a unas inusuales escenas de confraternidad entre los talibanes y las fuerzas de seguridad afganas, que fueron vistos abrazándose y tomándose fotos juntos.
Fuente/La Jornada