CIUDAD DE MÉXICO.- “Revolución quiere decir transformación profunda, la sustitución de una estructura por otra”,dice el historiador mexicano Juan Brom.
Cuando en un país hay una revolución las cosas cambian completamente, se establece un nuevo proyecto en todos los sentidos.
¿En el caso de México y hubo una revolución?
Para un mejor entendimiento, los historiadores dividen la Revolución Mexicana en diversas etapas para su estudio; aquí, una división menos ortodoxa:
Todos contra Porifirio Díaz: Francisco I. Madero a la cabeza, apoyado por Pascual Orozco, Emiliano Zapata y Francisco Villa. Todos contra Madero. Encabezados por Pascual Orozco, Zapata y más antiguos porfiristas como Bernardo Reyes y Félix Díaz. Pero el que se avivó y tomó el poder fue Victoriano Huerta. Todos contra Huerta. Con Venustiano Carranza, quien unió a Villa, Zapata y Álvaro Obregón a su lado. Y todos contra todos. Huye Huerta y se pelean entre sí.
VARIOS PRESIDENTES, NINGÚN PROYECTO
Francisco I. Madero era un hacendado aristócrata del porfiriato sin un proyecto de cambio; simplemente aspiraba a la presidencia, pero fue derrocado y asesinado por Victoriano Huerta.
Huerta era un militar del porfiriato que tampoco planeó cambio alguno, más que el de la persona en la silla presidencial.
Más adelante ganó la guerra Venustiano Carranza, otro político porfirista que tampoco planteaba cambios.
Finalmente triunfó Álvaro Obregón, un hacendado rico y próspero, producto del porfiriato, que continuó la misma política económica.
Entre Madero y Obregón pasaron 10 años… y no hubo revolución.
TODOS CONTRA TODOS: SÁLVESE QUIEN PUEDA
Todos los llamados revolucionarios aparecen hoy como héroes y todos se mandaron matarentre sí.
El héroe Venustiano Carranza mató al héroe Emiliano Zapata.
El héroe Álvaro Obregón mató a los héroes Francisco Villa y Venustiano Carranza.
El héroe Plutarco Elías Calles mató al héroe Obregón.
Después Calles fue desterrado por el héroe Lázaro Cárdenas.
Y DESPUÉS DE LAS BATALLAS, ¿TODO SIGUIÓ IGUAL?
Antes de la Revolución, México era una República Federal; después, también.
Antes de la Revolución, el federalismo y la democracia fueron fingidos; después, también.
Antes había grupos de privilegio; después, también.
Antes de la Revolución, México dependía de sus caudillos; después, también.
Antes de ella, la política se ejercía en grupos cerrados en los que el ciudadano no tenía participación; después, también.
Antes había una política económica capitalista liberal; después hubo un capitalismo de Estado con represión social.
El analista Macario Schettino es tajante al decir: “El régimen creó la revolución para legitimarse, porque ésta nunca existió”.
FUENTE: EXPANSIÓN