CIUDAD DE MÉXICO.- La Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México presentó un informe preliminar sobre las actividades de las cuentas allegadas al grupo virtual Legión Holk, con presencia en plataformas como Facebook y Twitter.
En el marco del ataque armado de un joven de 15 años contra su maestra y compañeros del Colegio Americano del Noreste, en Monterrey, la Unidad de Inteligencia Cibernética de la procuraduría capitalina decidió lanzar una investigación ante supuestas amenazas de acciones similares en la ciudad, ventiladas en cuentas de la llamada Legión.
De acuerdo con José Roberto Uribe Ruiz, titular de Inteligencia Cibernética, algunos de los usuarios de estas cuentas han superado el “humor negro” y han optado por la “radicalización” con el objetivo de “desestabilizar a la sociedad”. Los individuos han sido expulsados de sus propias comunidades virtuales de origen.
Según el informe de la PGJ, los integrantes de estas “legiones” van de los 12 a los 16 años de edad, y buscan generar trending topics y tendencias en internet con humor negro y campañas de odio. Sin embargo, algunos de los perfiles han degradado su actividad troll por la apología del delito.
“No sólo existe una sola Legión Holk, hay varias comunidades deformadas, muchos de ellos rebasan el límite del humor negro, que era el objetivo inicial de este grupo en redes sociales, y que ahora han desvirtuado su participación al grado de hacer apología de la violencia o incitar al delito”, informó el funcionario capitalino.
Diversos reportes indican que el agresor del Colegio Americano formaba parte del grupo en Facebook Legión Troll, en el que habría publicado mensajes alusivos a la tragedia. Esta mañana, el gobierno de NL confirmó que el joven advirtió a sus compañeros de clase un día antes del tiroteo que llevaría un arma a la escuela.
Tras asegurar que continuará con la investigación de la actividad de estos grupos y de foros secretos en otras plataformas, la PGJ hizo un llamado a los padres de familia para que refuercen valores en sus hijos y vigilen su actividad en internet, pues conductas radicales pueden traer consecuencias. (Fuente: SDP)