CIUDAD DE MÉXICO
El coordinador general de Ganadería, Francisco Gurría, afirmó que con el paso de los años la industria avícola del país se consolidó hasta llegar a posicionarse entre los primeros lugares del mundo como una importante generadora de proteína de pollo y huevo.
Durante la 54 Asamblea General Ordinaria de la Unión Nacional de Avicultores (UNA), el funcionario tomó protesta de ley a la nueva Mesa Directiva de la organización, que encabezará César Quesada Macías, para el periodo 2016-2019.
En su mensaje, Gurría Treviño señaló que la instrucción del titular de la Sagarpa, José Calzada Rovirosa, es trabajar de cerca con los directivos de la industria avícola para reformar los mecanismos existentes en la promoción del consumo de estos alimentos que son muy accesibles para la población en general.
Destacó que hoy en día hay más de 10 empresas mexicanas que se dedican a fraccionar el huevo y elaboran diversos productos para consumo humano y siguen evolucionando para lograr ser importantes exportadores, lo que demuestra la capacidad de respuesta a los desafíos que se han presentado.
La industria avícola nacional, dijo, es uno de los sectores pecuarios más relevantes, con una aportación del uno por ciento al Producto Interno Bruto (PIB) y genera seis de cada 10 kilogramos de proteína animal que se consumen en el país.
Recordó que durante 2015 esta industria produjo cinco millones 830 mil 244 toneladas de alimentos, lo que significó un crecimiento de cuatro por ciento respecto a lo obtenido en 2014, con un valor de 131 mil 200 millones de pesos.
En específico, el año pasado, huevo y pollo registraron un incremento de 2.0 y 5.6 por ciento, respectivamente, y se prevé que al cierre de este año el consumo per cápita de huevo sea de 22.2 kilogramos y de pollo 31 kilos.
En tanto, el nuevo presidente de la UNA aseguró que asume la dirigencia en un momento determinante y que trabajará para responder con responsabilidad a uno de los sectores más estratégicos de la industria alimentaria del país.
Quesada Macías indicó que el sector avícola destinó inversiones en los últimos años para programas de bioseguridad y en la modernización de su planta productiva, en plantas de incubación, rastros de gallinas, biodigestores e industrialización de pollinaza.
Ello ha permitido hacer más eficientes sus procesos, aunque quedan retos importantes para alcanzar un desarrollo mayor de esta industria, agregó.