Agencias
CIUDAD DE MÉXICO
En entrevista videograbada con Proceso, Rafael Caro Quintero sostiene que no mató a Enrique Camarena y asegura que estaba “en el lugar equivocado”.
En la clandestinidad, tras 28 años de prisión y casi tres prófugo, Caro Quintero rompió el silencio y aseguró que no está en guerra con nadie “El Chapo y El Mayo son mis amigos”, dijo.
De acuerdo a un fragmento de la entrevista que se publica en la edición 2073 de la revista Proceso, aseguró que desde niño fueron “buenos amigos” él y Joaquín Guzmán, ambos nacieron en Badiraguato, en Sinaloa y se vieron en 2013 cuando “El Chapo” estaba prófugo.
“No estoy en guerra con nadie”, sentenció Caro Quintero quien fue liberado en 2013 tras un fallo que encontró supuestos errores de procedimiento, pero actualmente prófugo de la justicia luego de que el gobierno de Estados Unidos ofrece una recompensa de 5 millones de dólares, mientras que el gobierno de México lo acusa de haberse reincorporado al narcotráfico y desatar una guerra contra el Cártel de Sinaloa.
La entrevista con el capo se transmitirá en Proceso TV este lunes, misma se efectuó en la clandestinidad por la periodista Anabel Hernández, una vez que gente cercana a Caro Quintero se contactó con ese medio de comunicación.
Desde algún lugar del norte de México, Caro Quintero aseguró que quiere vivir en paz, que no quiere volver al narcotráfico.
“A mí no me interesa ninguna plaza, a mí no me interesa ningún estado, fronteras. ¿Por qué? Porque ya no trabajo, simplemente así”, dice al tiempo que asegura que quiere dedicarse a la ganadería.
Las autoridades creen que Caro Quintero quiere disputarle desde la sombra el territorio al cártel de Sinaloa, cuyo líder, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, se encuentra preso y en medio de un proceso de extradición a Estados Unidos.
En la entrevista, Caro Quintero, de 63 años y que pasó 29 de ellos en prisión por el asesinato en 1985 del agente de la DEA Enrique Camarena, rechaza la acusación y pide perdón.
“Nunca había hablado de este caso es la primera vez (…). No lo secuestré no lo torturé y no lo maté (a Camarena). Sí estuve en ese lugar (del crimen), es mi participación, nada más”, señala al medio mexicano. “Si, estuve allí en el lugar (del crimen) esa fue mi participación, nada más”.