CIUDAD DE MÉXICO
La organización World Animal Protection lanzó el documental “El secreto detrás de su sonrisa: La multimillonaria industria del entretenimiento con delfines”, que cuenta todo lo que vivió Lorena “Kia” López como entrenadora de delfines en México, “en un negocio que recauda hasta 500 millones de dólares por la venta de boletos a costa del sufrimiento de los animales”.
De acuerdo con los testimonios, en estos lugares, los delfines son usados como tablas de surf, rodeados por los gritos de multitudes de personas y música de fondo con un alto volumen.
Además de que tienen que soportar el flujo interminable de turistas que buscan una foto perfecta para sus redes sociales.
“Trágicamente, los estanques donde viven los delfines son como cubetas de agua, porque no se comparan con los infinitos océanos en los que deberían estar nadando libremente”, señala.
En la presentación virtual del documental, Yolanda Alaniz, consultora de Conservación de Mamíferos Marinos de México (Comarino), advirtió que los delfines fuera de su hábitat natural son una fuente de contagio de enfermedades de la piel para los humanos, e incluso, pueden ser portadores y transmitir el covid-19.
“En San Diego, ya se identificaron dos delfines de la Naval, dos delfines en cautiverio, que ya presentan el mismo Coronavirus que ha provocado la pandemia, es decir, nosotros les hemos transmitido a ellos Coronavirus, y ellos ahora tienen Coronavirus y pueden transmitirlo a los seres humanos.
“Cómo esta enfermedad podemos hablar de la brucelosis, de la tuberculosis y de otro tipo de virus, es más, al acercarse con los delfines y tocarlos y estar cerca del espiráculo cuando ellos respiran, cuando exhalan emiten bacterias, virus y se han identificado en los cultivos que se han hecho”, alertó.
“Kia” López recordó que debido a su constante convivencia con delfines tuvo un eccema muy fuerte en la piel que llegó a parecer una quemadura de primer grado, por lo que los doctores le recomendaron dejar el trabajo, porque le estaba haciendo muchísimo daño.
Según la investigación de World Animal Protection, en México hay cerca de 300 delfines en cautiverio en 25 delfinarios, principalmente en Quintana Roo (70 por ciento), donde debido a la prohibición de capturarlos en vida silvestre o importarlos al país, que existe desde 2002 y 2003, respectivamente, se ha creado una “fábrica de delfines”, con reproducciones en cautiverio de manera artificial, “donde se abusa de los machos para extraer su semen y se abusa de las hembras para embarazarlas”.
El documental “El secreto detrás de su sonrisa: La multimillonaria industria del entretenimiento con delfines” se puede ver aquí: