La maicena es un producto que se suele usar en la cocina para elaborar masas y postres, pero también sirve para hidratar el cabello seco y si el pelo es lacio, le da una caída perfecta, con lo cual puedes olvidarte del “frizz”.
Para preparar esta receta necesitas los siguientes ingredientes: una taza de agua, una cucharada sopera de maicena, dos cucharadas de acondicionador (el que usas regularmente) y una cucharada de un aceite vegetal (argán, almendras, oliva, jojoba, aguacate…), esto es para darle una mayor hidratación y brillo.
Ahora, mezcla la maicena con el agua hasta que no queden grumos, luego cocinarás a fuego medio, hasta que tome una consistencia homogénea y esté a punto de hervir.
Retira del fuego y deja enfriar, para después agregar el acondicionador y aceite, mezclando con una batidora o en la licuadora para que se integren bien todos ingredientes.
Para aplicarlo necesitas, primero, lavarte el pelo como regularmente lo haces y ya que retiraste el exceso de agua, untarás la mezcla por mechones desde mitad del cabello hacia las puntas, y luego sube hacia la raíz.
Puedes cubrir cada mechón con papel aluminio, pues la mezcla necesita calor para que se accionen los nutrientes de la mascarilla capilar, o al finalizar de cubrir todo el pelo, pues colocarte un gorro de plástico y encima una toalla previamente calentada en el microondas.
El calor debe permanecer de 15 a 20 minutos, y luego espera a que el cabello se enfríe para retirar la mezcla lavando el cabello, nuevamente.
Existe una variante para este tratamiento, pues al colocar el papel aluminio en los mechones del pelo con la mascarilla ya puesta, puedes pasar la plancha para alaciar, lo cual le dará calor extra y un mejor alaciado, aunque en muchas ocasiones no es necesario; sin embargo, este plus de alaciado no se consigue en pelo quebrado o muy rizado.