Dormir es algo fundamental para todos y nuestros bebés no son la excepción. Por lo tanto, es importante elegir el mejor colchón para que ellos, que pasan los primeros meses de su vida durmiendo la mayor parte del tiempo, estén cómodos, confortables y seguros.
Tipos de colchón:
1. Goma espuma. Son los más livianos y puedes encontrarlos en diferentes espesores. Busca aquellos que se hundan al hacer mucha presión sobre ellos. Una superficie muy blanda puede producirle riesgo de asfixia debido a que puede ajustarse a la forma de tu niño y no dejarlo girar.
2. Resortes. Son los de mayor calidad y por lo tanto los más caros. Su superficie es firme y duradera.
3. Orgánicos. Están fabricados con materiales orgánicos como la lana, las fibras de coco y el algodón. Su relleno es una goma espuma fabricada a base de plantas y látex natural.
4. Respirables. Son los más buscados porque están fabricados de materiales que se supone que dejan que el bebé respire aun teniendo la cara sobre la tela.
tips:
Que sea del tamaño correcto para que no queden partes libres en la cuna porque tu hijo corre riesgo de asfixia.
Que sea firme, pues aunque a ti te parezca muy duro, tu hijo no va a tardar en adaptarse. Si el colchón es muy blando, tu bebé corre el riesgo de ahogarse.
La resistencia del relleno, pues al empujar con la mano el centro del colchón este tiene que volver a la normalidad de inmediato.
Presta atención a la funda que lo cubre, es importante que sea resistente al agua (por si alguna vez se le “escape” el pis).
Evita los colchones de segunda mano, está comprobado que pueden provocar síndrome de muerte súbita con más frecuencia que uno nuevo.
