El Samsung Galaxy Fold está ocupando antes de llegar al mercado más portadas de las que le gustaría a la compañía surcoreana. Tras los primeros análisis y reportes de varios de periodistas, youtubers y analistas de Estados Unidos, los primeros en disponer de este terminal, que evidenciaban un amplio abanico de fallos que este teléfono presentaba en su pantalla principal, la compañía decidía ayer posponer indefinidamente tanto diferentes eventos locales alrededor del mundo como la puesta a la venta en el mercado norteamericano, prevista para este mismo viernes día 26 de abril.
Este martes Reuters informa de que la firma habría comenzado a solicitar que le sean devueltos dichos dispositivos prestados inicialmente a un pequeño grupo de personas con el fin de poder llevar a cabo los análisis correspondientes para delimitar el origen y causa de los mismos.
Una acción de acuciante necesidad si se tiene en cuenta que Samsung no parecía haber advertido dichos problemas en sus tests previos antes de salir de fábrica y que, como se ha mencionado, la comercialización del teléfono era inminente.
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