En la actualidad, tener acceso a Internet es algo esencial en nuestras vidas, pero también lo es garantizar la seguridad de nuestra red Wi-Fi. En muchas ocasiones, nos preocupamos por potenciar la señal para que llegue a todos los rincones de nuestra vivienda, pero también debemos tener en cuenta que esto podría facilitar el acceso de nuestros vecinos a nuestra conexión. En este artículo vamos a explicarte algunas opciones para evitar que tu Wi-Fi sea robado por los vecinos.
Una de las opciones más drásticas es ocultar la red Wi-Fi. Para ello, deberás deshabilitar la red inalámbrica desde la configuración del router. De esta forma, no solo impedirás que los vecinos se conecten a tu red, sino también que tus dispositivos lo hagan. Aunque esta medida es radical, puede resultar útil en momentos en los que vayas a estar un tiempo fuera de casa.
Otra alternativa para ocultar la red Wi-Fi es simplemente ocultar el nombre de la red. De esta forma, el Wi-Fi estará habilitado, pero no aparecerá visible en la lista de redes disponibles. Esta opción no es muy efectiva en cuanto a seguridad, pero sí puede ser útil para ocultar la red a aquellos usuarios que no tengan grandes conocimientos en la materia.
La ubicación del router también es un factor importante a tener en cuenta. Si colocas el router cerca de las ventanas, la señal llegará más lejos fuera de tu vivienda, lo que facilitará que los vecinos puedan acceder a tu conexión. Para evitarlo, puedes colocarlo en una zona alejada de la calle o utilizar una habitación con paredes gruesas que debilite la señal.
Otra alternativa para limitar la señal es ajustar la potencia del Wi-Fi en la configuración del router. Si te conectas al Wi-Fi desde la misma habitación donde está el router, es posible que quieras evitar que la señal llegue más allá de unos cuantos metros. Para ello, basta con ajustar la potencia de la señal a un nivel bajo.
Por último, también puedes utilizar dispositivos PLC sin Wi-Fi para conectar tus dispositivos a Internet. En este caso, conectarás los aparatos por cable de red, evitando que haya otra red disponible y que pueda llegar a otras personas.
En conclusión, existen diversas opciones para evitar que tu Wi-Fi sea robado por los vecinos. Desde ocultar la red inalámbrica hasta limitar la señal o utilizar dispositivos alternativos, la elección dependerá de tus necesidades y de lo que te resulte más cómodo y seguro. Lo importante es tomar medidas para garantizar la privacidad de tu conexión Wi-Fi.