Camila Sodi, que declaró que terminó su relación con el “Chicharito” por culpa de nosotros los periodistas, ahora ya tiene novio, un chico judío exitosísimo y millonario arquitecto, Michel Rojkind, con el que fue a la alfombra roja del concierto de Bjork y dice que nosotros nos metemos en su vida privada. ¿Es culpa de nosotros los periodistas que ella publicó en las redes las fotos de ella y el “Chicharito” para que las vieran? ¿Es culpa de nosotros la prensa que ella va al debut de prensa de Bjork con nuevo novio? Porque no es que la vieron visitando el convento, ni estaba en el museo de Antropología, ella quiere que le saquen fotos con hombres triunfadores, ella quiere mostrar sus romances y se “indigna” que le pregunten de sus novios. Camila, si te bajas los calzones en la plaza de Toros México ¿cómo esperas que nadie te vea las pompas y encima te enojas que se metan en tu vida? Camila Sodi dice que desde que es niña, la persigue la prensa, ¡pues para haberla perseguido tanto, no ha aprendido nada!
Kate del Castillo en Ingobernable huye cuando la culpan de matar a su marido, el Presidente de México, Erik Hayser, que es idéntico a Enrique Peña Nieto y durante 48 horas, mientras todo el ejército la busca, camina por todo México con tacones de aguja sin ir al baño, sin comer y sobre todo sin esguinzarse el tobillo en los hoyos que hay en nuestra Ciudad, corre entaconada, viene, va, no suda y el copete nunca se le sale de su lugar, no hay una prófuga más sexy que Kate, que cuando finalmente se cambia de ropa para pasar “inadvertida”, se pone camisetitita escotadísima con brasiere sadomasoquista de mil tirantes, ¿a poco venden ese brasiere en la tiendita de la esquina y cuesta diez pesos o le mandaron el sostén en helicóptero?
El hijo de Pepe Aguilar es un vil pollero de lujo, que quién sabe cuántas veces traficó con humanos antes de que lo cachara la policía, aquí lo increíble es ¿cómo sale Pepe Aguilar, que ha sido invitado de honor en la Casa Blanca a decir: “Mi hijo no es un delincuente” cuando traía metidos a 4 chinos como sardinas en su cajuela.
