Ciudad de México.- Después del 4 de enero, día en el que Julián Gil y Marjorie de Sousa fueron citados para realizarse la prueba de ADN, pareciera que la actitud de los dos cambió y por fin decidieron hablar sobre hacer lo correcto para el bien de su hijo. Gil buscó el momento para poder dialogar con la venezolana en relación a un acuerdo en el que ambos estén tranquilos. Sousa ha cambiado la actitud que había tenido en los últimos meses con el padre de su hijo, a quien acusó de ser un irresponsable.
Marjorie busca llegar a un acuerdo, pues considera que por el bien de su hijo es lo mejor. Lo cierto es que Julián ha actuado muy sereno en este asiento y la ha escuchado para poder dialogar de una manera en la que ambos logren entablar un acuerdo. Quizás las denuncias que enfrenta la actriz son parte de lo que hoy a ella y a sus abogados, los ha llevado a buscar soluciones sobre los derechos y obligaciones que como padres de Matías, están enfrentando.
