Los resultados que arrojan las encuestas de opinión –como los publicados ayer en estas páginas, producto de un estudio que hizo el sitio web Oraculus–, son meras consideraciones científicas que demuestran el estado actual de la situación política, con meses de antelación al proceso electoral del 1 de julio, considera el maestro José Fernández Santillán, del Tec de Monterrey.
El también doctor en Historia de las Ideas Políticas por la Universidad de Turín, Italia, en entrevista con Grupo Cantón, apunta que, sin embargo, las encuestas se han ganado una desconfianza por sus pronósticos errados no sólo en México, sino en Estados Unidos, donde se vaticinó el triunfo de Hillary Clinton y no fue así.
Fernández Santillán alerta que la información arrojada por los estudios demoscópicos debe ser tomada con la debida precaución. Y anota un dato que escapa: Existe una fuerza más poderosa que las tendencias de los tres principales precandidatos juntos (Andrés Manuel López Obrador, Ricardo Anaya y José Antonio Meade), “y esa es la de los indecisos, que no se toma en cuenta”.
Esa fuerza, dice el maestro José Fernández, le ganaría a AMLO en las urnas, pues son más. “Es gente que está indecisa, y que podría modificar su voto de última hora”. Por ello, y por los antecedentes de que las encuestas han fallado, recomienda no confiar en las mismas.
OCURRENCIAS Y DESCALIFICACIONES
Sobre las precampañas, el también analista político subraya que se observa una despiadada lucha por el poder, y “así no se conduce una competencia democrática. Sólo veo ocurrencias y descalificaciones, donde el marketing tomó el control”.
Aún más: “Esto que estamos viendo no son precampañas, pues no hay competencia al interior de los partidos políticos. ¿A quién tratan de engañar? Las ideologías están en el abandono”.
Y sobre las coaliciones electorales que se registraron –Morena-PT-PES, y PAN-PRD–, dice que éstas son como mezclar el agua y el aceite, pues no hay coincidencias ideológicas, al dejarlas en el abandono.
Sobre el Partido Revolucionario Institucional y su candidato –José Antonio Meade Kuribreña–, expone que el tricolor impuso a la tecnocracia, otra vez, pues el exsecretario de Hacienda y Crédito Público pertenece a la elite de Luis Videgaray Caso, quienes se apoderaron del país desde el sexenio de Carlos Salinas de Gortari.
“Y José Antonio Meade no conecta con la gente, pues siempre ha estado en oficinas burocráticas y no había tenido contacto con la gente. Estamos frente a la degradación de la democracia”, concluye.(David Casco/Grupo Cantón)
