CIUDAD DE MÉXICO.– La estrella de Hollywood Leonardo DiCaprio entregó a la justicia de Estados Unidos donaciones y regalos, incluido un Oscar de Marlon Brando, recibidos del fondo estatal malasio 1MDB, que es investigado por lavado.
Un portavoz del actor de 42 años informó este viernes a la AFP que luego de iniciada una acción civil en julio pasado del gobierno contra “ciertos actores” en la producción de “El Lobo de Wall Street” de Martin Scorsese, DiCaprio se comunicó con el Departamento de Justicia “para determinar si alguno de estos regalos y donaciones de caridad provienen de las partes” investigadas y devolverlos.
DiCaprio inició “la devolución de estos objetos, que fueron recibidos y aceptados por él con el propósito de incluirlos en una subasta anual de caridad para su fundación” ambiental.
Su portavoz dice que lo hizo antes de que fuera interpuesta el jueves una nueva demanda en Los Ángeles contra la productora Red Granite, que financió la cinta.
“También regresó un Oscar originalmente ganado por Marlon Brando, que fue entregado al señor DiCaprio por Red Granite en agradecimiento a su trabajo en ‘El Lobo de Wall Street’”, que protagonizó.
Picasso y Basquiat
La nueva acción del jueves busca confiscar medio millón de dólares en activos, adquiridos con dinero desviado del fondo estatal, blanco de un gigantesco escándalo internacional.
Entre las propiedades están un yate de lujo valorado en 261 millones de dólares comprados por el empresario malasio Jho Low, cuadros de Pablo Picasso y Jean-Michel Basquiat, así como las regalías de otras dos películas de Red Granite, productora cofundada por el hijastro del primer ministro de Malasia, Riza Aziz.
En un comunicado Red Granite dijo que estaba “cooperando” con la justicia.
En julio de 2016, las autoridades estadounidenses lanzaron una primera ofensiva para recuperar 1.000 millones de dólares en activos, incluyendo aviones privados, apartamentos de lujo y las regalías de la película de Scorsese, que fue nominada al Oscar.
Los activos fueron adquiridos como parte de una supuesta operación internacional para blanquear miles de millones de dólares desviados del 1Malaysia Development Berhad (1MDB), un fondo público creado en 2009 para modernizar el país.
El fondo ahora tiene deudas por 10,000 millones de euros (USD 11.200 millones). El gobierno malasio niega cualquier irregularidad.(Fuente: Animal Político)