Redacción / Grupo Cantón
Netflix y Nu celebraron el regreso de Merlina con una experiencia inmersiva que combinó humor, estilo gótico y proyección en grupo.
Cine.- La noche del estreno del primer capítulo de la segunda temporada de Merlina se convirtió en un auténtico homenaje al estilo oscuro que caracteriza a la serie. Con una alfombra morada, producción impecable y una atmósfera que mezcló lo gótico, lo pop y lo digital, el evento organizado por Netflix y Nu fue mucho más que una simple activación.
Desde la entrada, el espacio fue completamente “instagrammeable”, con luces, cámaras y una estética que parecía salida del universo de Tim Burton. La noche atrajo a influencers, tiktokers y fans, muchos de ellos con atuendos que iban desde lo elegante hasta lo excéntrico, en perfecta sintonía con el universo de Merlina Addams.
La conducción del evento estuvo a cargo de Javier Ibarreche, quien presentó una de las sorpresas de la noche: un cortometraje protagonizado por Piecito, un personaje ficticio que, como Dedos, vive aventuras en busca de fama digital. El relato, lleno de humor y guiños al mundo del contenido, fue bien recibido por los asistentes.
La proyección del primer episodio fue el punto culminante del evento. Alejada del típico ritual de ver la serie a solas, la experiencia colectiva generó carcajadas, gritos y reacciones espontáneas, demostrando que ver Merlina en grupo es otro nivel.
La noche concluyó entre fotos con Dedos, cupcakes temáticos y cócteles oscuros, consolidando a Merlina como un fenómeno cultural que sigue cautivando a las nuevas generaciones.