El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, llamó este domingo a que en los próximos comicios extraordinarios en Puebla, el 2 de junio, no haya un fraude electoral, y no se incurra en prácticas como el acarreo, la compra de voto o la explotación de la pobreza de la gente.
“Que se haga ese compromiso, que las elecciones sean limpias, sean libres”, mencionó López Obrador en Puebla.
“Ya el gobierno no tiene partido, ni tiene sindicato, el gobierno es de todos, y ya no va a ser como antes, que el gobierno apoyaba a un partido o a un candidato”, agregó.
“No se usará dinero del presupuesto para favorecer a un partido o candidato”.
Puebla tendrá elecciones extraordinarias dado que en diciembre pasado, al estrellarse el helicóptero en que era trasladada, murió la gobernadora panista Martha Erika Alonso, y su esposo el exgobernador Rafael Moreno Valle.
Martha Erika Alonso llegó al gobierno luego de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación validara los comicios en los que su rival de Morena, Miguel Barbosa, acusó fraude electoral.
El mandatario federal dijo que “no es advertencia ni mucho menos amenaza”, pero que cuando se den las elecciones en Puebla, “el que cometa un delito electoral va a la cárcel sin derecho a fianza”.
Lo anterior, ya que el Congreso federal aprobó ampliar el catálogo de delitos en los que se aplica prisión preventiva oficiosa, incluyendo los delitos electorales. Sin embargo, para que se aplique la reforma aún falta la aprobación de al menos 17 congresos estatales.
“Que nadie se atreva a usar mi nombre para decir que tiene mi apoyo”, dijo López Obrador al insistir en que el gobierno federal se mantendrá al margen de las elecciones en Puebla, sin respaldar a algún candidato, aunque sea del partido Morena, que lo llevó a la presidencia.
Para que no haya ningún motivo de cuestionamiento, dijo, no visitará Puebla hasta que pasen las elecciones del 2 de junio.
“La libró el licenciado”
Este domingo, durante el evento junto al presidente López Obrador, de nueva cuenta hubo abucheos para un gobernador local, en este caso el mandatario interino, Guillermo Pacheco Pulido.
Ante ello, en su discurso López Obrador elogió a Guillermo Pacheco, diciendo que había trabajado en la reconciliación en el estado.
“Es una gente mayor, que sabe conciliar, que llegó en un momento muy difícil, después de ese accidente lamentable en que perdieron la vida la gobernadora, su esposo, dos pilotos y un ayudante”, dijo López Obrador.
Al hacer esa mención a la gobernadora fallecida, Martha Erika Alonso, se escucharon algunos chiflidos, ante lo que el presidente continuó su discurso, levantando un poco la voz.
“Nosotros no deseamos mal a nadie, y tenemos que buscar la unidad”, agregó el mandatario.
En algunos estados, continuó López Obrador sobre el tema de los abucheos, “no le fue tan bien a los gobernadores en los actos, les reclamaban, pero aquí la libró el licenciado Pacheco porque son más los aplausos”, dijo el presidente, y entonces sí la gente aplaudió a Guillermo Pacheco.