Hablar de bienestar animal es hablar de amor al prójimo. Es reconocer que toda forma de vida merece respeto, cuidado y protección.
Desde la Cuarta Transformación entendemos que la justicia no solo se ejerce entre personas, sino también con los seres vivos que comparten nuestro territorio. Cuidar de ellos es también cuidar de nosotros mismos.
Por eso, en Quintana Roo hemos hecho del Bienestar Animal una política pública, no un gesto simbólico. A través de la Caravana de Bienestar Animal, llevamos servicios veterinarios gratuitos directamente a las colonias, a los pueblos, a las comunidades donde más se necesitan.
Nuestra meta es clara: que el derecho al cuidado animal sea un derecho de todas y todos, sin importar el nivel económico ni el lugar donde se viva.
Las caravanas eliminan barreras: no hay cobros, no hay intermediarios, no hay privilegios. Solo hay cercanía, atención y empatía.
En cada jornada realizamos esterilizaciones gratuitas, consultas veterinarias, vacunaciones y entrega de kits de bienestar animal con alimento, antipulgas, vitaminas y material posoperatorio. Cada acción cuenta, porque detrás de cada mascota atendida hay una familia más tranquila y una comunidad más sana.
La esterilización es un acto de amor y de responsabilidad social.
Previene el abandono, evita el sufrimiento y ayuda a controlar la sobrepoblación animal que tantas veces termina en violencia o en enfermedad. No se trata solo de cuidar, sino de prevenir y educar.
Hasta hoy, más de 1,500 animales han sido esterilizados de manera gratuita en todo el estado, gracias al trabajo coordinado entre la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente, los municipios, organizaciones civiles y cientos de voluntarios comprometidos con el cambio.
Este programa es un ejemplo de lo que la Cuarta Transformación busca en cada política pública: un gobierno cercano, humanista y solidario, que escuche, que acompañe y que transforme desde la raíz.
Seguiremos recorriendo colonias, domos, escuelas y comunidades con la Caravana de Bienestar Animal, porque estamos convencidos de que el bienestar de nuestros animales es también el bienestar de nuestras familias y de nuestro estado.
En Quintana Roo cuidar la vida en todas sus formas no es un discurso, es una convicción.
Nos mueve el amor, nos guía la justicia y nos une la esperanza.
