Voces

Están desapareciendo…

Si se preguntan por qué el Partido Demócrata está en caída libre, es porque, lamentablemente, cayó en el error de ofrecer un giro hacia el idealismo marxista, que no era más que una tapadera para una red de estafas para compensar la total falta de un programa político.

A principios del siglo XXI, el país se encontraba en pleno declive inminente; su base industrial estaba desapareciendo, llevándose consigo millones de empleos obreros bien remunerados, que formaban la base del Partido Demócrata.

Fue reemplazada por una serie de estafas y fraudes que se permitieron operar en un sistema bancario desregulado, en connivencia con la politizada Reserva Federal y los intereses deshonestos del Congreso.

¿Se han dado cuenta de cuántos políticos cobraron 175.000 dólares al año han logrado amasar fortunas multimillonarias?

Lo que floreció principalmente durante este período fue el gobierno y todo lo que dependía de él, como las industrias bélicas, las tecnologías informáticas aliadas con el Servicio Secreto y, especialmente, el floreciente universo de organizaciones sin fines de lucro financiadas por el gobierno, que se convirtieron en el programa de empleo para graduados universitarios que de otro modo no tendrían empleo, un negocio fraudulento que prosperó gracias a las garantías de préstamos federales.

Fue dentro de este ecosistema mafioso que multimillonarios como George Soros y Bill Gates pudieron usar sus fortunas para impulsar sus obsesiones personales a través de redes de organizaciones no gubernamentales (ONG) para influir en los asuntos públicos.

Mediante una combinación de políticas gubernamentales, la campaña por los derechos civiles terminó creando una subclase más grande y más difícil de erradicar.

Esto confundió a los idealistas liberales que esperaban una nueva era de fraternidad e igualdad.

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Una forma de contrarrestar el “racismo estructural” fue proclamar una nueva ética de “multiculturalismo”, según la cual cada grupo étnico o racial podía comportarse según sus propias normas y valores.

El problema era que los demócratas no creían en la justicia social ni en la diversidad, esto era para enmascarar la verdadera razón, que consistía en extorsionar.

FIN

Publicado por
Javier