Roberto Lemus / Grupo Cantón
Una turista colombiana acusó a un taxista de intimidarla, impedirle usar transporte por aplicación y exigirle una tarifa excesiva.
Tulum.— Una turista colombiana denunció que un taxista intentó cobrarle 1,200 pesos por un traslado corto hacia Aldea Zamá, además de agredirla verbalmente luego de impedirle utilizar un servicio de transporte por aplicación en la zona hotelera.
El caso fue reportado a través de la línea de emergencias “Línea Contigo”, lo que activó la movilización de elementos de seguridad.
Según el informe oficial, la afectada, identificada como Alejandra “N”, de 26 años, relató que el incidente comenzó cuando pretendía pedir un vehículo de plataforma digital para regresar a su hotel.
En ese momento —dijo— varios taxistas bloquearon el paso y le señalaron que únicamente ellos podían brindar servicios en esa área, negándole la opción de usar el transporte solicitado desde su teléfono.
La turista explicó que, ante la presión del grupo y el flujo elevado de visitantes en la zona, terminó abordando la unidad que los propios taxistas le señalaron. Sin embargo, al llegar a Aldea Zamá, el conductor le exigió el pago de 1,200 pesos, una tarifa muy por encima de los costos habituales y que la joven consideró totalmente injustificada.
Al cuestionar el monto, el operador reaccionó con agresiones verbales y un comportamiento intimidante, lo que —según la turista— la hizo temer por su integridad. En ese momento decidió solicitar apoyo mediante la línea de emergencia, informando a las autoridades sobre el abuso.
De acuerdo con el reporte, el taxista, al percatarse de que la víctima había pedido ayuda, accedió de última hora a recibir 400 pesos, retirándose rápidamente del lugar antes de que la autoridad llegara. La turista no sufrió lesiones físicas, pero manifestó su preocupación por la falta de control sobre algunos operadores del transporte público y las prácticas de intimidación contra mujeres y visitantes extranjeros.
Elementos de seguridad que acudieron al punto confirmaron que la denuncia quedó asentada para el seguimiento correspondiente y la posible aplicación de sanciones administrativas.
Las autoridades municipales reiteraron el llamado a turistas y residentes a reportar cualquier intento de cobro excesivo, bloqueo, agresión o conducta irregular por parte de operadores del transporte. Señalaron que estas denuncias permiten reforzar los operativos de vigilancia y evitar que abusos como este se repitan en zonas turísticas de alto flujo.
