Redacción / Grupo Cantón.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente impone cierre total y multa millonaria tras detectar múltiples violaciones al bienestar animal.
Cancún , Q.R.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) anunció el 12 de mayo de 2025 la clausura total definitiva del delfinario Dolphinaris Barceló, ubicado en el hotel Barceló Riviera Maya. La medida se tomó tras identificar siete irregularidades que comprometieron el bienestar de los mamíferos marinos bajo su resguardo, imponiendo además una multa de 7 millones 526 mil 240 pesos al operador del recinto, Acuario Arrecifal, S.A. de C.V.
Entre las violaciones detectadas se encuentran prácticas inadecuadas durante sesiones interactivas, la realización de acrobacias sin autorización y la participación de ejemplares en actividades mientras estaban en tratamiento médico sin la aprobación veterinaria correspondiente.
La Profepa señaló que el recinto superó en múltiples ocasiones el límite autorizado de personas en los programas interactivos y no realizó las evaluaciones de salud mensuales y semestrales requeridas por la normativa. También se detectaron temperaturas del agua superiores a los 27 grados centígrados, incumpliendo con los estándares establecidos para el manejo adecuado de estos animales.
La procuradora federal de protección al ambiente, Mariana Boy Tamborrell, enfatizó que cualquier instalación que maneje mamíferos marinos debe cumplir estrictamente con las responsabilidades legales para garantizar el trato digno y respetuoso de los ejemplares.
Asimismo, informó que la Profepa presentó una denuncia penal ante la Fiscalía General de la República contra quien resulte responsable, basándose en el artículo 420, fracción I, del Código Penal Federal, que sanciona con penas de uno a nueve años de prisión y multas significativas a quienes ilícitamente capturen, dañen o priven de la vida a mamíferos marinos.
Este cierre definitivo se produce tras años de denuncias por parte de organizaciones ambientalistas y de protección animal, que han documentado muertes y desapariciones de delfines en el delfinario, incluyendo a los ejemplares Alex, Plata, Mincho y Kala. Las protestas y exigencias de clausura por parte de activistas han sido constantes desde 2019, señalando condiciones de hacinamiento, estrés y maltrato en las instalaciones.
La Profepa ha anunciado que, además de esta clausura, realizará inspecciones en todos los delfinarios del país para asegurar el cumplimiento de las normativas y garantizar el bienestar de los mamíferos marinos en cautiverio.
