Paloma Wong / GRUPO CANTÓN
Chetumal.- La zona arqueológica de Ichkabal no le quitará visitantes a Chacchoben, ambos ubicados en el municipio de Bacalar, pues cada uno tiene aspectos relevantes que el turismo debe conocer y admirar, consideró Hiram Gómez koyoc, director de turismo en el décimo municipio.
El mes pasado, el Gobierno Federal aperturó la zona arqueológica de Ichkabal, que se ubica a 58 kilómetros al suroeste del Pueblo Mágico de Bacalar, este lugar vendrá a reforzar el circuito histórico de las zonas arqueológicas de la zona sur de Quintana Roo.
Ichkabal destaca por sus imponentes edificaciones, y por una plaza principal que se extiende a lo largo de 300 metros. El tipo y disposición de sus edificios sugieren que fue ocupado desde el Preclásico temprano.
Sin embargo, esta zona arqueológica no competirá ni le quitará visitantes a las ruinas de Chacchoben, pues cada una tiene aspectos relevantes que el turismo debe conocer y admirar, consideró Hiram Gómez koyoc, director de turismo en Bacalar.
“Es un complemento son dos zonas arqueológicas completamente diferentes, una es del postclásico y otra del preclásico temprano”, apuntó.
Indicó que antes de la apertura de Ichkabal, Chacchoben era y es visitado por el turismo que llega a Mahahual vía crucero, lo cual generaba una gran derrama económica, ahora con la apetura de esta otra ruina ya se podrá dividir las visitas o en su caso tener grupos que vayan a conocer las dos zonas, aunado al turismo que llegue vía terrestre.
El director de turismo en Bacalar, explicó que la apertura del tren maya será un factor que vendrá a detonar ambas zonas arqueológicas, pues a través de ellas se podrá llegar a ambos destinos, e incluso para conocer a la Laguna de los siete colores.
