Redacción / Grupo Cantón
Un estudio estadístico realizado por Buendía & Márquez revela que la población de la zona sur sí desea desarrollo turístico de gran escala, siempre que se cumpla con la normatividad ambiental y se generen beneficios tangibles para las comunidades.
Chetumal.- Durante años, la conversación pública sobre el desarrollo en el sur de Quintana Roo ha estado dominada por voces externas, muchas de ellas alejadas del territorio y ajenas a las prioridades cotidianas de Bacalar, Othón P. Blanco y Felipe Carrillo Puerto. Sin embargo, por primera vez, un estudio estadístico de alta calidad —realizado por Buendía & Márquez del 26 al 30 de noviembre de 2025— permite conocer con precisión qué quieren realmente las y los habitantes del sur.
La respuesta es clara y contundente: la población sí desea desarrollo turístico de gran escala, siempre que se cumpla con la normatividad ambiental y se generen beneficios tangibles para las comunidades.
Los datos son inequívocos. El 78 % de la población está a favor de que se desarrollen proyectos turísticos en su municipio, frente a solo 9 % que se opone. Además, 74 % considera que los beneficios de los proyectos de gran escala superan sus inconvenientes cuando son bien regulados y ambientalmente responsables.
Este respaldo se complementa con una percepción ampliamente positiva del turismo como motor de progreso: 94 % afirma que las empresas que llegan deben mejorar las condiciones del pueblo, y 84 % sostiene que los proyectos de alta escala sí generan más empleo, mejor economía y mayor calidad de vida .

La encuesta también revela una visión moderna y equilibrada del desarrollo. 83 % de la población cree que los proyectos grandes pueden coexistir con la naturaleza, señalando que el debate local no se reduce a “turismo vs. medio ambiente”, sino a cómo lograr un modelo que combine bienestar social, protección ecológica y oportunidades económicas reales .
La gente del sur sabe exactamente qué necesita saber antes de opinar: primero, si habrá empleo (35 %); segundo, cuáles serán los beneficios y los posibles impactos (28 %); y tercero, qué medidas ambientales se van a cumplir (23 %). Esto demuestra algo muy importante: la población no está en contra del desarrollo; lo único que pide es información clara y proyectos que cumplan la ley. Es una comunidad que quiere decidir con datos, no con rumores.
Finalmente, las expectativas son abrumadoramente positivas: 94% de la población considera que los proyectos turísticos de gran escala volverán a la región más moderna, más rica (89 %), más turística (80 %) y con mejor calidad de vida (88 %) .

El sur de Quintana Roo ya decidió. Quiere desarrollo turístico, quiere oportunidades y quiere que llegue inversión de gran escala, siempre que cumpla con la ley y respete el ambiente.
La conversación pública nacional debe reconocer esta demanda del territorio. En el sur de Quintana Roo el debate ya no es si debe haber o no desarrollo, sino cómo asegurar que ese desarrollo sea justo, sostenible y verdaderamente beneficioso para los habitantes de a región.

