Caracas.- En medio de una creciente tensión internacional, Nicolás Maduro reapareció públicamente este lunes bailando y enviando un mensaje desafiante a sus seguidores: aseguró que “nadie” podrá apartarlo del poder, pese al incremento de la presión del Gobierno de Estados Unidos, cuya presencia militar en el Caribe se ha intensificado en los últimos días. Según diversas fuentes, Washington evalúa incluso ingresar a territorio venezolano mientras el espacio aéreo del país permanece cerrado y sobre el mandatario pesa una recompensa de 50 millones de dólares.
La prensa estadounidense reveló que el presidente Donald Trump sostuvo una llamada telefónica con Maduro la semana pasada. De acuerdo con estos reportes, Trump habría ofrecido garantías para que él y su familia pudieran abandonar Venezuela a cambio de su renuncia. Sin embargo, el líder del chavismo se habría negado y, en su lugar, exigió una “amnistía global” para él y sus aliados.
Aunque los detalles de la conversación no han sido confirmados oficialmente, Trump reconoció que ambos hablaron y anunció que el lunes 1 de diciembre convocará una reunión en la Casa Blanca dedicada a la crisis venezolana.
El Miami Herald, citando fuentes anónimas familiarizadas con la llamada, aseguró que Trump transmitió un mensaje “contundente”: “Tienes que abandonar el país ahora”. Según el medio, Maduro habría solicitado mantener el control de las Fuerzas Armadas, al estilo del acuerdo alcanzado en Nicaragua en 1991 cuando Violeta Chamorro llegó al poder. Ese esquema, que permitiría elecciones libres, fue descrito por el periódico como un posible “modelo cubano”.
Maduro exhibe fuerza interna
Frente a este escenario, Maduro apareció ante sus simpatizantes durante la juramentación de los nuevos “Comandos de Comunidad Bolivarianos Integrales”, un organismo que el gobierno presenta como instancia de control territorial. Allí calificó las presiones de Estados Unidos como “terrorismo psicológico” y aseguró que no han logrado alterar la estabilidad del régimen.
“No nos han sacado con su terrorismo psicológico ni un centímetro del camino correcto por el que debemos caminar siempre”, afirmó. “No nos podrán sacar jamás, bajo ninguna circunstancia, del camino de la revolución”.
El mandatario insistió en que Venezuela no se entromete en asuntos de otros países y exigió reciprocidad: “No nos metemos con nadie en este mundo, que no se metan con Venezuela”.
También reiteró que las Fuerzas Armadas están listas para responder ante cualquier acción militar proveniente de Washington. A su juicio, el aparato militar venezolano ha demostrado unidad y compromiso en la defensa de “cada palmo de tierra venezolana”.
Según Maduro, incluso la población civil ha alcanzado un nivel de preparación sin precedentes. “El pueblo ha realizado ejercicios populares, militares y policiales, y Venezuela ha entrado en un punto que nunca antes tuvimos en capacidad defensiva integral”, sostuvo. “El pueblo demostró que está empoderado, que tiene una conciencia máxima y está listo para seguir construyendo la patria en paz”.
La crisis política y las tensiones diplomáticas entre Caracas y Washington parecen así escalar a un nuevo nivel, mientras ambos gobiernos mantienen versiones contrapuestas sobre el futuro inmediato de Venezuela.