Redacción / Grupo Cantón
Tultitlán.- La decisión judicial que marca el futuro del bebé encontrado en febrero pasado en este municipio se tomó después de una serie de valoraciones psicológicas, ambientales y administrativas que el sistema de protección estatal realizó durante meses. Fuentes cercanas al proceso indicaron que, más allá de la historia penal de sus progenitores, uno de los factores clave fue la ausencia de estabilidad en las posibles cuidadoras biológicas, lo que demoró las fases iniciales del expediente.
Especialistas que participaron en el análisis detallaron que el menor mostró avances favorables en su desarrollo durante su estancia institucional, lo que reforzó la recomendación de integrarlo a una familia adoptiva que pueda asegurarle continuidad emocional y acceso a servicios médicos y educativos en el mediano plazo.
La jueza encargada del caso también instruyó que, una vez avanzado el trámite, el niño recibirá un seguimiento cercano por parte de trabajadores sociales para garantizar que la transición se realice sin contratiempos. Organismos civiles consultados destacaron que este tipo de resoluciones suelen priorizar la creación de vínculos afectivos sólidos durante los primeros años de vida, etapa crucial para su bienestar futuro.
Con la resolución ya emitida, el área encargada de adopciones iniciará los procedimientos de selección de candidatos, que incluyen entrevistas, visitas domiciliarias y un periodo de adaptación gradual. Aunque el expediente permanece reservado por tratarse de un menor de edad, se estima que la integración a un nuevo hogar podría concretarse en los próximos meses, conforme a los tiempos regulares del sistema estatal.