Juan R. Hernández / Grupo Cantón
Hubo buen ánimo presidencial pese a los desafíos / El tema de las extradiciones dependen del Gabinete Seguridad / Reconoce mandatario norteamericano trabajo de presidenta de México
Ciudad de México.- Luego de encabezar el pasado sábado el acto multitudinario por el séptimo aniversario de la Transformación en el Zócalo, la presidenta Claudia Sheinbaum llegó al Salón Tesorería con una sonrisa amplia y un “¡Ánimo!” que evocó de inmediato al expresidente López Obrador. De muy buen humor, la Jefa del Ejecutivo Federal comentó que, ante la cercanía de las fiestas decembrinas, quizá el 24, 25, 31 y 1 de enero no haya mañanera, un guiño festivo que muchos reporteros recibieron como el regalo anticipado de unas breves vacaciones.
Pero el ánimo ligero dio paso pronto a los temas de fondo. La mandataria fue cuestionada sobre su encuentro trilateral con Donald Trump y Mark Carney tras el sorteo del Mundial 2026 en Washington, DC. Sheinbaum aclaró que fue una reunión breve, sin grandes avances, pero cordial.
“Quedamos de seguir trabajando… fue una reunión de mucho respeto hacia México. Y el presidente Trump, eso siempre lo vamos a agradecer”, dijo.
La presidenta reafirmó que su postura es privilegiar acuerdos sobre la confrontación, justo mientras Trump declaraba que Sheinbaum “está haciendo un muy buen trabajo” y que México y Canadá están ayudando a romper récords en la venta de boletos mundialistas.
Ya en tono más serio, Sheinbaum respondió sobre el texto del Wall Street Journal, que habla de un posible tercer envío de narcotraficantes a Estados Unidos. Negó que exista tal decisión por ahora y precisó que cualquier traslado depende del Gabinete de Seguridad. “No se tiene contemplado en este momento… eso no quiere decir que no vaya a ocurrir después”, matizó.
Recordó que, cuando una persona detenida no tiene orden de aprehensión en México, suele deportarse; en otros casos se sigue el proceso de extradición. En lo que va del año, México ha enviado a EU a 55 líderes criminales, entre ellos “El Cuini”, dos mandos de Los Zetas y “El 200”, parte del círculo de Los Chapitos. Omar García Harfuch ha explicado que algunos continuaban operando desde prisión, lo que motivó esos traslados.
Con humor, política exterior y temas de seguridad, la mañanera cerró como empezó: con una presidenta de buen ánimo que, entre felicitaciones decembrinas, dejó ver que las tensiones del poder también admiten momentos de respiro.
