Redacción / Grupo Cantón
Con este objetivo, Luli creó a “Cancor”, un personaje que representa ese corazón que todos llevamos dentro
CDMX.- El bullying es una problemática que enfrentan muchos niños a diario, pero para la cantante Luli Pampín, pocas veces se reflexiona sobre quién lo ejerce y por qué.
“Siempre se le da visibilidad a quien lo recibe, pero ahora quiero hablar sobre quién lo hace y por qué suceden estos casos”, comentó la cantante en entrevista.
Con este objetivo, Luli creó a “Cancor”, un personaje que representa ese corazón que todos llevamos dentro y que a veces se esconde detrás de una travesura porque no sabe cómo pedir ayuda.
La idea surgió durante un campamento de verano, cuando le informaron sobre un niño que se comportaba mal. Al observarlo, se dio cuenta de que estaba constantemente aislado.
Preocupada por cómo sería para sus propios hijos, se acercó a él y lo incluyó en sus actividades. Según Luli, esto cambió por completo su comportamiento.
“Me di cuenta de que con solo prestarle un poco de atención y cariño, ese niño dio un giro de 360 grados. Era un pequeño muy amoroso, y me dolió más al ver que solo quería afecto, pero no sabía cómo expresarlo”, relató.
De esta experiencia nació su espectáculo “Bienvenidos, juntos otra vez”, donde el personaje Cancor acompaña a Luli para enseñar a los niños que no existen emociones malas, sino sentimientos que necesitan comprensión y ternura. La propuesta transmite que cuando alguien escucha con amor, todo puede mejorar.
El show, que se presentará hoy en la Arena Ciudad de México, también aborda los inicios de Luli como artista infantil. “Contamos cómo Luli pasó de ser la muñequita de una cajita musical a la superheroína que hoy conocen los niños”, destacó.
“A través de la música y el baile transmitimos un mensaje importante de manera tan natural que los niños apenas se dan cuenta”, añadió.
Luli asegura que también pensó en los padres de familia, ya que la combinación de música pegajosa, una historia entrañable y dinámicas divertidas logra que todos disfruten y bailen por igual
