Jocelyn Díaz / Grupo Cantón
Sátira, devoción y comunidad confluyen en una de las expresiones teatrales más antiguas y vigentes de la Navidad en México.
Cancún.- La pastorela nació en el siglo XVI como una herramienta evangelizadora impulsada por frailes que buscaban explicar el nacimiento de Jesús a través del teatro. Aquellas primeras representaciones se realizaban en atrios y plazas, con personajes fácilmente identificables: pastores ingenuos, demonios burlones y el arcángel San Miguel como figura del bien.
Con el paso del tiempo, este teatro popular se transformó en una tradición arraigada en la vida comunitaria. Escuelas, parroquias y centros culturales adoptaron la pastorela como una celebración colectiva donde el humor, la música y la crítica social encontraron un espacio de expresión.
En la actualidad, la pastorela ha dado un salto a los escenarios profesionales. Compañías teatrales reinterpretan el género desde nuevas narrativas: versiones contemporáneas, urbanas, tecnológicas o incluso interdimensionales conviven con montajes clásicos que conservan la estructura tradicional y el lenguaje popular.
Uno de los elementos que mantiene viva a la pastorela es su capacidad de diálogo con el presente. Los demonios ya no solo representan el mal abstracto, sino problemas sociales, políticos actuales; los pastores encarnan al ciudadano común y el humor se convierte en un espejo crítico de la realidad social.
Más allá del espectáculo, la pastorela sigue siendo un acto comunitario. Su montaje involucra a actores, músicos, vestuaristas, técnicos y familias enteras, fortaleciendo el tejido social y convirtiendo cada función en un ritual de encuentro, una celebración anual entre las compañías escénicas y creadores.

PERSONAJES BÁSICOS DE UNA PASTORELA Y SU SIGNIFICADO
LOS PASTORES
Representan al pueblo, a la humanidad que avanza entre dudas, errores y buenas intenciones. Son figuras cercanas al público, portadoras del humor y del sentido común, y simbolizan el camino espiritual del ser humano hacia el bien.
EL ARCÁNGEL
Es la figura del bien, la justicia y la protección divina. Representa la conciencia, la fe y la fuerza moral que guía a los pastores en su camino, enfrentando y venciendo al mal.
LOS DEMONIOS
Encarnan las tentaciones, los vicios y los conflictos humanos. A través de la sátira y el humor, representan problemas sociales y debilidades contemporáneas, adaptándose a cada época y contexto.
LUCIFER
Es el líder del mal. Simboliza el orgullo, la soberbia y la resistencia al cambio espiritual. En la pastorela, suele ser un personaje exagerado y cómico, lo que permite reflexionar sobre el mal sin solemnidad.
EL NIÑO DIOS
Representa la esperanza, la paz y el renacimiento espiritual. Es el destino final del recorrido de los pastores y el centro simbólico de la celebración.
LA VIRGEN MARÍA Y SAN JOSÉ
Simbolizan la protección, la humildad y la familia. Son figuras de amor que reciben a los pastores al final del camino.

¿QUIÉN CREÓ LA PRIMERA PASTORELA?
EN EL MUNDO
Las pastorelas tienen su origen en Europa, particularmente en España e Italia, durante la Edad Media, como parte del teatro litúrgico navideño.
No existe un autor único: fueron representaciones colectivas impulsadas por la Iglesia para dramatizar episodios bíblicos, especialmente el anuncio del nacimiento de Jesús y la adoración de los pastores.
EN MÉXICO
La primera pastorela documentada en México se atribuye a Fray Andrés de Olmos, alrededor del año 1530, en la época de la evangelización novohispana.
Fray Andrés de Olmos escribió textos en náhuatl y español, con el objetivo de explicar los pasajes bíblicos a los pueblos originarios mediante el teatro. A partir de entonces, la pastorela se expandió rápidamente por el territorio, integrando lenguaje popular, humor local y elementos de crítica social, lo que dio origen a la tradición que hoy conocemos.
En Cancún, la historia de la pastorela no se construyó desde archivos formales, sino desde la escena y la memoria viva de sus creadores. La Bambalina Teatro, una de las compañías pioneras del teatro en la ciudad, montó en 1989, en el Parque Amor Juana Inés de la Cruz la Pastorela “Por las calles de Cancún”, escrita y dirigida por Leonardo Kosta, figura clave en la formación de la escena teatral local, compartió con Quintana Roo Hoy, el director y dramaturgo yucateco Óscar López.
“Ese dato es importante porque yo soy heredero de esa tradición”, señala, quien comenzó a involucrarse activamente en la escritura y montaje de pastorelas junto a Kosta. Su proceso creativo evolucionó con el tiempo hasta asumir la autoría en solitario.
Óscar recuerda que su primera pastorela escrita fue en 1999, luego de haber trabajado previamente en coautoría con Leonardo Kosta, quien dirigía los montajes. Entre sus textos de aquella primera etapa se encuentra una pastorela de fuerte carga satírica titulada El diablo se llama Bush, reflejo del espíritu crítico y del diálogo constante del género con la coyuntura social y política.
Entre 2005 y 2016, Óscar López dirigió la Compañía Estatal de Yucatán en Mérida y durante ese periodo, la tradición de la pastorela en Cancún no se interrumpió. El actor Hirán Sánchez (q.e.p.d.), continuó el legado escénico montando al menos un par de pastorelas con textos de Óscar, manteniendo viva la conexión entre autor, escena y comunidad.

“Creo que la última que hice de la primera época en Cancún fue El señor de los diablillos”, recuerda el dramaturgo. A su regreso, inició una segunda etapa creativa con la pastorela El diablo viene de Cozumel, obra que marcó también una evolución en su estilo personal.
Una de las características distintivas del trabajo de Óscar López es la escritura en verso. “Mi pastorela personal la escribo en rima”, explica, subrayando una búsqueda estética que dialoga con la tradición del teatro popular y la musicalidad del lenguaje.
2018 Los chairos vienen en tren, 2019 El diablo viene del sur, 2020 El diablo tiene covid, 2021 La diabla tiene el poder, 2022 EL mal viste de azul, 2024 La Pastorela Monumental en el Teatro de la Ciudad y 2024 La maldad viene a crédito en el Centro Cultural Xbalamqué y actualmente presenta “El Portal de Belén”, la pastorela Interdimensional todos los jueves a las 20horas, en el Teatro de la Ciudad.











