Redacción / Grupo Cantón
Cancún.- La tormenta tropical Melissa se encuentra casi detenida en el Caribe, y esa misma lentitud es la que la convierte en una amenaza mayor. Mientras se desplaza apenas a unos pocos kilómetros por hora, está descargando lluvias de forma prolongada sobre zonas vulnerables, incrementando el riesgo de inundaciones y deslizamientos de tierra.
Este jueves por la mañana, Melissa estaba ubicada aproximadamente a 480 kilómetros al sureste de Kingston, Jamaica, con vientos sostenidos de alrededor de 80 km/h. Al moverse tan despacio sobre aguas cálidas (que funcionan como “combustible”), los expertos prevén que alcance la fuerza de huracán durante el fin de semana y que pudiera intensificarse rápidamente hasta convertirse en un huracán mayor (categoría 3 o superior) a comienzos de la próxima semana.
Los países que enfrentan el riesgo más inmediato son Haití, Jamaica y República Dominicana, que deberán prepararse para días de lluvias torrenciales —hasta 25 cm e incluso más de 30 cm en zonas aisladas—, además de la amenaza de deslizamientos en terrenos montañosos. En ese contexto, las autoridades han emitido avisos por inundaciones repentinas y escorrentías peligrosas.
Respecto a México, las instituciones meteorológicas como el Servicio Meteorológico Nacional y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) han indicado que la tormenta no representa por ahora un peligro directo para el país, gracias a su ubicación y trayectoria prevista. Sin embargo, se mantiene vigilancia permanente, especialmente en la zona de Quintana Roo, por si el sistema modifica su rumbo.