Gonzalo Zapata
CANCÚN, Q. Roo
Cerca de un centenar de personas, entre líderes de colonias y activistas del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) se manifestaron en las afueras de una bodega, ubicada en la Región 91 de Benito Juárez, en la que presuntamente este martes se les entregarían despensas, y en vez de ello les fueron retenidas sus credenciales de elector sin su consentimiento.
Los activistas, en su mayoría mujeres, aseguraron que fueron citados desde las 8 horas en dicha bodega. Conforme fueron llegando les pidieron sus credenciales; para el mediodía los encargados de la misma cerraron las puertas con las identificaciones para no volverlas a abrir.
“Un muchacho que se dijo el encargado nos fue pidiendo las credenciales, pero luego salió para decirnos que no nos iban a entregar las despensas pero que tampoco nos iban a devolver las ifes, incluso nos dijo que éramos unas muertas de hambre”, señaló unas de las afectadas.
Ante tal situación, las mujeres comenzaron a golpear la cortina metálica de la bodega, exigiendo la devolución de sus identificaciones, situación que se repitió en diversas ocasiones sin obtener respuesta alguna.
“A mí cada mes me dijeron que me iban a dar la despensa por buscar gente, diez personas porque soy jefa de manzana, además de las copias de las credenciales de las mismas personas”, apuntó una activista de la Región 227 de Cancún.
Durante la manifestación, algunas de las inconformes rociaron arroz y frijol en las puertas de la bodega, para continuar con la exigencia de devolución de las credenciales; incluso ya cansadas de no ser escuchadas solicitaron la intervención de elementos de la Gendarmería Nacional que se encontraban comiendo en un restaurante de mariscos cercano a la bodega.
Ante tal petición los gendarmes acudieron a la bodega para tomar conocimiento del hecho, luego de diez minutos de diálogo con las inconformes y de anotar algunos datos en su bitácora se retiraron sin dar mayor explicación.
Incluso, una patrulla de la Secretaría de Seguridad Pública del municipio también se aproximó para intentar obtener las credenciales, golpearon la cortina metálica y llamaron a quienes, presuntamente se encontraban en el interior de la bodega, tampoco obtuvieron respuesta.
Ya cansadas de no tener respuesta, las inconformes se retiraron del lugar sin sus credenciales y sin sus despensas.
