Imaginemos que tienes que comprarte una bebida en cualquier lugar, tienes sed y solo tomas refrescos, vas a la tienda y te encuentras 3 presentaciones; botella de plástico, de aluminio o botella de vidrio.

Tómate un momento para pensar ¿Qué envase es el más sustentable? Hoy quiero que empieces a analizar un poco las opciones que tienes de un mismo producto.

Para empezar, vamos a eliminar las botellas de plástico, es un producto innecesario que contamina nuestros mares y que además su reciclaje es complicado, a diferencia de las botellas de HDPE, el PET no es tan versátil, ya que el HDPE es un plástico más duro (las botellas de detergente por ejemplo) con el cual hacen muebles.  

Habiendo eliminado esa opción, que quedan dos más, la lata de aluminio o las botellas de vidrio. En realidad ambas son muy buenas opciones, pero hay algunos problemas con la botella de vidrio; el volumen y el peso.

Esto es lo que lo hace muy complicado para poder reciclarlo. Sacarlo de islas o trasladarlo a lugares donde se reciclan es muy costoso, por ello, la opción es la lata de aluminio.

El aluminio es un material que es muy bien pagado, por ello, hay muchas personas que lo buscan para llevarlo a reciclar, en cambio el vidrio no, de hecho, muchas veces si el vidrio esta roto, ya no es apto para reciclarse.

La opción para poder disponer de este material es reutilizarlo. Hay proyectos como la organización cerrando el ciclo, que disponen de este producto para hacerlo floreros, recipientes y joyería.

Este tipo de conceptos, además de disponerlo internamente, también te dan la facilidad de enseñarte a hacerlo en casa, para que puedas convertir tus botellas de licores o refrescos en lindos vasos que podrás utilizar.

En fin, estas son los pros y contras de tres presentaciones de un solo producto, el cual puedes elegir, pero lo más importante, ya sabes qué puedes hacer con ellos si no lograste evitarlos.

Espero lo empieces a implementar, no solo con refrescos, sino con cualquier tipo de producto. Esta es una manera de seguir ayudando a cuidar el medio ambiente y que nuestro Quintana Roo sea un EcoCaribe.

Nos leemos en la próxima.