La mejor manera de comprobar que alguien tiene pasión por lo que hace, sin mayor ciencia, es observando si al caminar arrastra los pies, a menos que sea por una causa mayor como alguna discapacidad, en todos los demás casos hay una probabilidad muy alta de que esta prueba sea real. Aquel que arrastra los pies al caminar, necesita una chispa de pasión para encontrar sentido a la vida.
Al leer el título: “Se acerca la semana de la Pasión”, tal vez a algunos les lleve a pensar en la pasión de cristo que se vive durante la Semana Mayor o Semana Santa, que, por cierto, será la próxima, o para otros pudiera transportarlos hasta el 1ro de julio, sobre todo a aquellos que sienten pasión por los procesos electorales, la política y afinidad por uno u otro perfil presidenciable, o la pasión por el futbol, que también ya está muy cerca el mundial, a solos unas cuantas semanas más.
Veamos que es la pasión, es una emoción definida como un sentimiento muy fuerte hacia una persona, tema, idea u objeto. Así, la pasión es una emoción intensa que engloba el entusiasmo o deseo por algo. Si esta definición de Wikipedia fuera la más acertada, entonces cada persona que siente pasión por alguien o por un tema, idea u objeto, estaría llena de emociones intensas que le permitirían vivir con mayor profundidad y entusiasmo.
Quien tiene encendida la llama de la pasión en su interior, llámese corazón, mente, espíritu, en las venas, en lo más profundo de su ser, tiene también un motivo por el cual seguir adelante, una motivación que le impulsa a continuar en el intento, un para qué, ante tantos acontecimientos que de repente tienen poco sentido que sucedan.
Se acerca la semana de la pasión, es una oportunidad de acelerar y alcanzarla, de correr a pesar de estar cansado y cruzar el umbral que permita ver la luz al final del túnel, la estrella en la inmensa oscuridad de la noche, la solución en el mar de problemas, actuar con pasión es haber visto la luz de la esperanza y recibir impulso para luchar por tus sueños y en muchas ocasiones es el único ingrediente que hace falta para darle sazón a la vida.
En nuestros días existe desgane, falta de energía y persistencia, hay desangelo y agotamiento constante, son pocos los momentos o elementos que encienden la chispa de la pasión, esa pasión que, al estar presente en la adversidad, te levanta e impulsa a seguir avanzando, a seguir construyendo y a seguir luchando por un mundo más humano y más abierto donde nuestra mano amiga se pueda extender más allá de los océanos, de las montañas y de los lagos, para dignificar a la humanidad y pasar de la intención a la acción, porque lo que se hace con pasión, trasciende, lo que no, claudica. Levantemos los pies y caminemos con PASIÓN.