Cómo olvidar aquel 9 de diciembre de 2012 poco más de la mitad de la jornada, eran como las 7:30 am y antes de llegar al puesto de hidratación los atletas extendían su mano, se mojaban los labios con el sudor que escurría por la cara, y con voz apresurada gritaban, ¡agua! ¡agua! Y la respuesta de los jóvenes animosos era, aquí ya se terminó, pero en el siguiente; y lo mismo dijeron en los otros módulos; claro que todo el plan mental cambió y los sentimientos de molestia, frustración y desánimo se hicieron presentes, algunas personas en la acera, portaban banderas o agitaban las gorras y aplaudían gritando ¡Vamos! ¡Ánimo! ¡Ya falta poco! Pero hidratación ya no había.
En el escenario anterior hay dos decisiones que se pueden tomar, o desistes debido a las circunstancias y las culpas o continúas a pesar de la adversidad y cruzas la meta; pareciera obvia la respuesta pero no lo es tanto y mucho menos fácil y es ahí donde la respuesta reside en tu interior, en lo fortalecida que sea tu voluntad y la claridad con la que se haya planeado el logro del objetivo, es ahí donde la fortaleza interior y la fuerza de voluntad son más fuertes que todo lo que acontece afuera.
En el caso de la Universidad ha pasado algo similar y en todo el sector educativo, todo estaba planeado con tiempos y movimientos, incluso hasta las vacaciones y como en el maratón dijeron ya no hay agua, al igual aquí se nos dijo, ya no hay universidad, se cierra y en la misma disyuntiva que los atletas, nos encontramos en la comunidad universitaria; o desistes, o continúas con lo que hay y fue entonces cuando la fuerza de voluntad y la fortaleza de la institución, que incluye a cada uno de sus integrantes, se hizo presente y aunque, está cerrada la universidad, la escuela sigue abierta.
¿Y qué representa esto? La fortaleza de los integrantes de la institución, de la Universidad Tecnológica de Cancún, de toda la comunidad universitaria, se hizo presente, y todas y todos, docentes, estudiantes, personal directivo, administrativo y operativo, pusimos a prueba la creatividad y a disposición los avances tecnológicos y al igual que en el maratón había personas en la acera echando porras aunque no hubiera hidratación, aquí en la universidad también tenemos a muchas personas, autoridades, padres de familia, desde donde están, animando y motivando, desde el estudiante hasta los docentes y personal de apoyo, para que todas y todos podamos cruzar la META.
Felicidades y muchas gracias a todas las personas que integran a esta gran institución y a todas las demás instituciones que, en esta situación tan imprevista, hemos encontrado oportunidades para sacar adelante cada uno de los proyectos que representan nuestros valiosos estudiantes y a ellos en particular, felicidades y gracias porque aun con la universidad cerrada, junto con sus docentes y demás integrantes de la institución, han logrado que la escuela siga ABIERTA.