Un Cancún desarrollado, seguro, limpio y con oportunidades para todos, es el Cancún al que se aspira. Porque que en nuestra ciudad, el municipio al que pertenece y su estado, hay sociedades cambiantes y jóvenes, pujantes y con recursos naturales impresionantes; en pocas palabras, es un paraíso tocado por la mano de Dios.

La palabra Cancún proviene del maya Kaan y Kun, que significa cuna o nido de serpientes. Y sin que esté incluido en el significado, también es un lugar paradisiaco que, por su ubicación geográfica y riquezas naturales, va mucho más allá de su significado.

Cancún es más que cuna de serpientes, es más de lo que parece o de lo que le han hecho parecer durante sus casi cinco décadas de creación.

Cancún es un sueño grande convertido en realidad. Es mi casa y tu casa, es la casa de millones de turistas cada año y es también un espacio para soñar y vivir ese sueño día a día como una realidad efímera.

Cancún es rico y ha hecho ricos a muchos; o tal vez podría decirse de mejor manera, muchos se han hecho ricos de Cancún y en Cancún. Miles de familias se han formado de la nada y del todo y así mismo por sus propias características, también muchas otras familias se han desintegrado.

Sin dejar de mencionar que es inacabado, es una ciudad viva y en constante movimiento; Cancún se construye cada día, en sentido real y en sentido figurado, se desarrolla con más infraestructura, más hoteles, casas habitación, más y más casi de todo; pero también al construirse, se va destruyendo y el desequilibrio es dañino.

Se requiere formar más ciudadanía que construir ciudad, porque de lo primero depende lo segundo. Para lograrlo, es indispensable que aquellos que tienen en sus manos la toma de decisiones comprendan lo que esto significa; gobernar una ciudad o municipio es una tarea con alto grado de responsabilidad. y sin duda tiene sus requisitos que a veces se dejan de lado.

Cancún es más que cuna de serpientes, es tu casa y mi casa y seguramente de nuestras futuras generaciones, es un paraíso tocado por la mano de Dios, Y se requiere que al seguir siendo tocado por la mano del ser humano, se haga con una visión amplia y generosa que permita contar con desarrollo, seguridad y generación de más y mejores oportunidades.