¿Alguna vez escuchó hablar del partido Movimiento Ciudadano en Solidaridad?

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Es decir, del partido político que encabeza el exgobernador de Veracruz que estuvo en la cárcel, Dante Delgado.  

O sea, de  un partido que perdió su registro y su dinero en la pasada elección. Que por muchos meses ha estado acéfalo en el Estado.

Un partido donde ahora milita Ludivina Menchaca, otra integrante del establo de Félix González. Que fue candidata perdedora a presidenta municipal de Puerto Morelos.

Porque el nuevo Frente, llamado Coalición por México al Frente, tal cual fue presentada ante el INE, hizo ya la repartición de posiciones. Formalmente.

Y en Quintana Roo quedaron las cuatro diputaciones así: La de Solidaridad para el partido Movimiento Ciudadano.  La de Othón P. Blanco para el PAN y las dos de Benito Juárez para el PRD,

O sea.

¿Qué va a pasar con el PAN?  Porque lo de Chetumal parece broma cuando ya están más que apuntados para Cancún.

Y si a eso le agregas el tema de las mujeres… están más que fritos.

Eso en una entidad gobernada por una coalición PAN-PRD precisamente.

¿De dónde salió la diputación para Dante Delgado?

Pues de la repartición arbitraria que hicieron de posiciones.  De los premios de consolación por la candidatura a la Presidencia de Ricardo Anaya, del PAN.

¿Quiénes van a ser los candidatos a diputados?  Quién sabe… pero quedaron más que limitados los que llevaban mano, los que están en caballo de hacienda, por esta repartidera en la Ciudad de México.

¿Las mujeres van por PRD o por PAN?  ¿Cómo va a ser la contabilidad de candidaturas, total en el país o por estado?  ¿La cuota de género aplica?

¿El gobernador tiene candidato para el partido Movimiento Ciudadano que no apoyó su llegada al poder pero que ahora es parte de la “coalición”, del nuevo Frente?

Y para las candidaturas de senadores, la repartición quedó igual de dispareja, la fórmula 1 para el PRD y la 2  para el PAN. 

O sea, todo para el PRD.  Como premio de consolación, pues.

El frágil equilibrio entre panistas y perredistas que Carlos Joaquín había conseguido en su Gabinete se rompe con esto.  Y lo que es peor, quedan pocos espacios para los panistas que ya estaban apuntados para competir, justamente donde son “competencia”.

Y tenemos el agravio de poder volver a tener a Ludivina Menchaca en las boletas…