Una mañana igual a esta, pero de 1910, México vivía un hito en su historia, al ser fundada la Máxima Casa de Estudios, la Universidad Nacional Autónoma de México, la cual junto con el IMSS (dirigido por Zoé Robledo), son las máximas instituciones sociales del país, de acuerdo al pensamiento de mi amigo el doctor Mario Luis Fuentes.
Será acaso que en el “doctorado” de Derecho Constitucional que cursó Ricardito Monreal, habrá omitido leer alguna lección de Cívica y Ética, por aquello de su comentario contradiciendo al presidente Andrés Manuel López Obrador, con respecto del bloqueo de Cuba, optando por ser diplomáticamente correcto, afirmando que es mejor “no pelear con nadie”. ¿Estimado senadorsito Monreal Ávila no se mordió la lengua al decir eso?
Ese mismo curso de Ética no le caería mal, al Góber de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, por aquello que el exfutbolista optó por hacer unos “swings” este fin de semana con sus amigos, Jorge Campos y Arturo Elías Ayub, que atender a sus paisanos afectados por las lluvias al norte del estado. ¡Hay prioridades!
Será acaso que tales personajes tengan como meta asemejar la popularidad de la exprimera dama, Angélica Rivera, y no precisamente con la ciudadanía, sino con la oligarquía y algunos gerentes de bancos, pues aseguran los confidentes de este tunde-máquinas que Rivera Hurtado y su hermana, en los Pinos, tenían una oficina en la cual “trabajaban” organizando todos los eventos de la presidencia de la República, cof, cof, incluidas las fiestas de Sofía Castro y compañía.
Menos mal que en el inmueble donde despachaba “La Gaviota”, en el -hoy- complejo Cultural Los Pinos, se tiene previsto para finales de septiembre inaugurar “Cencalli, La Casa del Maíz”, el primer museo dedicado a la cultura alimentaria, gracias al trabajo de la Secretaria Alejandra Fraustro. ¡Enhorabuena!
POST-IT ¿Qué pensará el gobernadorsito Enrique Alfaro sobre lo desahuciado que su gobierno tiene a Jalisco?, debido al cobarde asesinato del hijo del diputado Mario Lemus.
Expresó mi pésame al morenista y pronta resignación a su familia.