El año viejo se va y el nuevo llega ya, uno más que se suma al calendario de nuestras vidas, para los quintanarroenses con miles de sinsabores y cientos de augurios, como ven la balanza no está pareja y es que es preocupante lo que está pasando en el estado, sobre todo en Cancún, la joya del Caribe mexicano.
Sin embargo, no voy a poner el dedo sobre la llaga, de un Quintana Roo que día a día se va deteriorando y la delincuencia acaparando espacios, hoy es para encender un rayo de esperanza, es un canto y una oda a la esperanza, la hermandad, la solidaridad y la paz.
Hay que levantar las copas por un mundo más equilibrado, desterrando los rencores y aprender a perdonar.
Sin dudas aprender a negociar, será de las tareas que no se quitará de la planificación de mes con mes, uno de los proyectos importantes de la Cuarta Transformación es el Tren Maya que nos toca de cerca y debe comenzar a dar sus primeros pasos en el primer trimestre del año, por lo que la comunicación con los pueblos mayas será decisivo, ya no se puede dilatar más el proceso.
Avanzar en los negocios de la contingencia del sargazo que a nivel de las tres órdenes de gobierno se debe estar mejor preparados en la temporada, es otro pendiente, por lo que se han desplegado varias acciones tales como la fabricación de embarcaciones sargaceras, donde la Secretaría de Marina ya ha tomado la batuta.
El crecimiento hotelero va viento en popa, no así las Manifestaciones de Impacto Ambiental que atentan contra los cambios de uso de suelo, el tema de nunca acabar; así como la tala de los manglares, la duna costera del estado acabada, la erosión de las playas otro asunto escabroso, y el blanqueamiento de corales persistente, por lo tanto negociar para que no avancen más estos fenómenos es fundamental.
Esto por una parte, pero también hay otra palabra mágica que inquieta y se trata del presupuesto, si tan solo éstas son algunas de las cuestiones que aqueja a la entidad: ¿Habrá bolsa económica que la aguante? ¿Si están garantizados los recursos?
Existen diferentes maneras de realizar estrategias de mercado, así como diferentes actividades diarias para manejarlo, eso es lo que se espera que no vaya al azar, descarrilándose. E
l viaje al año 2020, apenas va a comenzar, esperemos que para Quintana Roo y toda la población cosmopolita que habita en este maravilloso territorio de tierras ancestrales mayas, como tierra de excelentes guerreros progrese para bien.Solo me queda destapar el corcho de la botella y decir salud por ustedes amigos lectores, la esperanza es lo último que se pierde, pero saque usted sus propias conclusiones, punto y final.