Hoy se cumple un año y medio de que Carlos Joaquín González asumió la gubernatura de Quintana Roo, uno de los estados del país que tenían una marcada hegemonía priista, que desde su nacimiento creció bajo la batuta del partido tricolor, el cual, con el pasar de los años, tras cuatro décadas para ser exactos, la ciudadanía se cansó de los falsos discursos, de la demagogia, pero sobre todo, de los encargados de llevar los hilos de la entidad, quienes simplemente se aprovecharon de la confianza que depositó la ciudadanía en ellos para enriquecerse junto con sus familiares y amigos más cercanos.
A 18 meses del bien llamado gobierno del cambio, Carlos Joaquín ha venido cumpliendo los compromisos de campaña, el “cambio” del que algunos se jactan que es solo un slogan de gobierno, para este reportero no lo es, definitivamente el cambio se ha gestado de forma gradual, pues no existen varitas mágicas ni tampoco magos que puedan resolver de forma súbita o instantánea los problemas de un estado joven, sí, pero muy maltratado por sus antecesores.
El cambio está hecho y sigue en camino, con sus piedras en el mismo pero avanzando de forma decisiva y coherente, así lo ha demostrado Joaquín González., aquellos que aún dudan del “cambio” les preguntaría ¿creen que de haber triunfado Mauricio Góngora hoy estuviera un ex gobernador preso y varios funcionarios más en capilla?
Una petición de la ciudadanía fue la recuperación de las Villas del Crea, ubicadas en la zona hotelera de Cancún, las cuales fueron vendidas a precios irrisorios por la pasada administración. Son asuntos que llevan un proceso, que hay que litigar; sin embargo, el compromiso y la tenacidad del gobernador nuevamente demuestran de qué está hecho y el pasado viernes fue una realidad.