Los ricos también lloran, como en la telenovela de Televisa de 1979, pero hay de dolor a dolor…
Aun cuando las lágrimas no fueron visibles, Raúl Salinas Pliego (11,700 millones de dólares) ha resentido las críticas e insultos que recibe en redes.
Por ejemplo, cuando un cibernauta le reprochó tomar whisky, y su manera de hacerlo.
Contestó: “Tomo lo que se me antoje… así somos los multimillonarios… pero eso no lo va a saber usted, porque no creo que gane ni para tomarse un Chivas…”
Otra vez se trenzó con el comentarista de ESPN, David Faitelson, por culpar a las televisoras públicas de influir en el VAR.
“…(Gordo) te dimos de tragar por años…”
Tampoco gustaron al dueño de TV Azteca los programas de la serie “Pancho Villa y una Mujer Desnuda” que la escritora Sabina Berman difundió en Facebook.
Expresó: “Me odia porque la despedí…”
Menos, el comentario de la periodista Denise Dresser a raíz de la salida de México de Best Buy, y su burlona despedida.
“…en las tiendas Elektra, los consumidores pagan por una licuadora el resto de sus días, por una tasa de interés que los exprime como naranjas”, escribió ella.
La réplica no se hizo esperar: “…por más que quiera presionarnos, no permitiremos que use su posición mediática para que le perdonemos la licuadora que compró hace 20 años”.
Sin embargo, lo que más afectó a Salinas Pliego es que el SAT lo obligara a pagar.
“Salió para pagar con lo que gané acá con black Jack…pero los muertos de hambre gobiernícolas y paleros comunistas en lugar de estar contentos porque les voy a dar de tragar unos años, siguen llorando. Exijo que la cenadora -con c- se ponga a dieta…
Ahhh, y con esos $2,800 millones, cómprese un jabón y báñese, perro comunista. Agradézcame que va a tener para tragar croquetas otros 2 años”.
La “cenadora” es Citlalli Hernández, secretaria general de MORENA, quien no lo bajaba en plataformas de “evasor”.
¿Quién es “el perro comunista”?
No hay dolor más grande que el de bolsillo…