Mientras la discusión pública se centraba en los temas del abucheo finsemanero en un estadio de beisbol y en la solicitud andresina de disculpas sobre todo hispanas (el Papa Francisco hizo saber que él ya dijo en su momento lo que tenía que decir sobre el asunto), el cuasi arcángel Poncho Romo (mensajero divino) hizo saber a empresarios estadunidenses asentados en México que “vamos a pasar de una austeridad republicana a una pobreza franciscana”./
Heraldo de la intimidad obradorista en materia de empresas e inversiones, Romo le dijo a su audiencia representativa de capitales extranjeros, en un tono ligeramente conminatorio: “Créanle al presidente, porque, lo que dice, lo hace (…) No duden”.
Y extendió ante los presentes la tabla de los nuevos mandamientos en materia de austeridad y restricciones: “Las últimas dos semanas (el presidente) nos ha pedido más recortes. El problema de recortar tanto es que veo a las secretarías agobiadas, porque les quitaron una gran parte del presupuesto y de la gente”./
Pero, aseguró el virtual vocero presidencial para asuntos empresariales, “hay determinación a no incurrir en déficit fiscal. No tengan duda. Primero hace otras cosas (López Obrador) que no cumplir ese mandato. Para bien o para mal; ya veremos después cómo corregimos”. El sacrosanto dogma del no al déficit fiscal, reivindicado en su pedestal prioritario a unos días de que el propio presidente de la República había dado por abolida la política neoliberal y su modelo económico de rapacidad, chantaje y entreguismo./
Ya ante reporteros, la sinceridad del arcángel del recorte se volvió relativa prudencia: “No nos dijeron de cuánto (será el recorte), porque queremos ser muy responsables fiscalmente. El Presidente nos lo pidió en el Salón de Tesorería y estamos todos analizando si algo sucede. Si no ocurre, no pasa nada.
Es como de previsión, exactamente, porque queremos cumplir 100 por ciento lo que hemos dicho. Será en todas las secretarías” (las citas referentes este tema han sido tomadas de la nota de Susana González en La Jornada, https://goo.gl/jr1ivk )./
Las expectativas respecto a “si algo sucede” no tienen correspondencia grave con los datos económicos, bursátiles y financieros inmediatos. El obradorismo parece contento con los números oficiales relacionados con su gestión en el terreno económico y hay suficientes voces en las redes sociales que reprochan a sus contrincantes el haber anunciado o deseado un apocalipsis económico que no se ha presentado. Y, sin embargo, se prevé un recorte más en las secretarías de Estado, como “previsión”, por “si algo sucede”, según palabras del jefe de la oficina presidencial./
Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del presidente López Obrador, entró en un primer plano político a partir del Video de Comalcalco, tomado en una zona arqueológica del municipio ubicado en Tabasco. Escritora e investigadora, con grado doctoral, y experiodista, ha declinado la tradicional designación de “primera dama” y, en consonancia con esa decisión, no preside ni dirige el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia, conocido como DIF, coto históricamente destinado a la cónyuge del presidente en turno, para su lucimiento personal mediante el uso de programas asistenciales./
En cambio, Gutiérrez Müller preside el Consejo Honorario de la Coordinación Nacional de Memoria Histórica y Cultural de México. Un cargo menor, de apariencia difusa, que sin embargo está suministrando al presidente de la República la base argumental del lance internacional más polémico y estratégico del gobierno federal.
Aparte de acompañar de manera muy simbólica al presidente de la República con una pirámide detrás de la toma hecha en Comalcalco, la historiadora hizo ya en el acto oficial correspondiente, en el municipio de Frontera, una amplia exposición de lo sucedido en Centla, Tabasco, quinientos años atrás (https://goo.gl/p6ZS8x ). A querer o no, la figura de la señora Gutiérrez Müeller tendrá otras connotaciones a partir de este episodio histórico, diplomático y político.-
Ayer estuvo el presidente de la República en Baja California. No visitará más la entidad, para entrega de recursos asistenciales, hasta después de las elecciones de congreso local, presidencias municipales y gubernatura, para que no se le acuse de utilizar los programas gubernamentales para apoyar a su partido, Morena. La llegada a Mexicali provocó que reporteros locales buscaran, como es la naturaleza de su oficio, declaraciones del visitante que es un paradigma informativo./
En particular, la prensa bajacaliforniana pedía que AMLO precisara si su visita tiene relación con los problemas internos de Morena, cuyo candidato a gobernador, Jaime Bonilla (el primero de los “superdelegados” en pasar de esta condición a la de competidor electoral), está siendo cuestionado por la forma en que se impuso su postulación y se trató de imponer otras candidaturas. AMLO se negó a responder a esas solicitudes de la prensa local, señalando que él es dueño de su silencio e invitando a la conferencia mañanera que realizará hoy en Tijuana./
La visita de López Obrador tiene implicaciones políticas en cuanto Jaime Martínez Veloz trató de ser el aspirante de Morena a la presidencia municipal de Tijuana, pero fue “bateado” mediante el ya clásico recurso de las “encuestas” fantasmales, que solo conoce la autoridad que anuncia ganador y perdedores. Martínez Veloz ayer mismo se registró como aspirante pero ya no a la alcaldía tijuanense sino a la gubernatura, a nombre de una alianza de fuerzas bajo el registro del Partido de la Revolución Democrática.
Una escisión de este tipo no debería alarmar a la fuerza morena que parece encaminada a poner fin a la hegemonía panista de tres décadas en Baja California, pero el perfil de Martínez Veloz y las corrientes que se están nucleando en torno a su candidatura requieren de tejido político fino en Morena, bajo conducción superior. ¡Hasta mañana!