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La muy vulgar agresión a Beatriz Gutiérrez Mueller a través de las redes sociales, a propósito del tema relativo a las investigaciones que realiza la Fiscalía General de la República (FGR) a investigadores del Conacyt, simboliza la desesperación y la falta de estrategias que permitan al grupo opositor al Gobierno de la República avanzar en su intento de recuperar el poder y volver a imponer el imperio de la corrupción y los beneficios exclusivos para ese reducido grupo.
La expresión popular, “patadas de ahogado” le viene muy bien a la descripción de lo que aquí está ocurriendo y ello es porque, han intentado de todo y no logran que sus objetivos se cumplan.
Por ejemplo, han recurrido a gobiernos extranjeros para suplicar apoyo para quitarle el poder a la estructura del Gobierno de México, en particular, a Estados Unidos y a España y lo poco que han logrado, es que organizaciones de ultraderecha les financien sus acciones; en Estados Unidos por ejemplo, han logrado que Washington direccionara 25.7 millones de dólares a través de la Embajada norteamericana en México en el periodo 2019-2020.
Estas donaciones fueron entregadas a la organización “Mexicanos contra la corrupción y la Impunidad” de Claudio X González y no representan el interés del Gobierno norteamericano de derrocar a Andrés Manuel López Obrador, representa la presión que ejerce la ultraderecha norteamericana a su gobierno para que financie a través de organizaciones ligadas a la Casa Blanca.
Esta estrategia languidece y está destinada al fracaso, toda vez que las investigaciones periodísticas que se hicieron en México para denunciar dicho financiamiento, develaron un comportamiento muy inmoral, pero sintomático de este tipo de organizaciones; con este dinero, Claudio X González se asignó un salario de 7 millones 520 mil pesos, mientras que María Amparo Casar Pérez cobró un sueldo de 11 millones 100 mil pesos durante ese periodo, es decir, algo así como 462 mil 500 pesos mensuales.
El Gobierno español, y más específicamente en La Casa de los Borbones, ha apoyado con cuanto puede; propaganda maliciosa en medios de comunicación, financiamiento a través de diversas organizaciones y, recientemente, con la llegada del partido político “VOX” que pretende operar en nuestro país .
Este grupo también ha suplicado el apoyo de la OEA, organización que ha entrado en desuso con el fortalecimiento de la Celac, han rogado ante el Vaticano, estado que, congruente, ha decidido estar del lado de la dignidad latinoamericana.
Pero todas estas intentonas no tienen otro objetivo que no sea, volver a robar las riquezas de este país; por ello la llagada de VOX, por ello las absurdas declaraciones de Aznar a quien, pero nada de ello es gratuito, el interés es volver a instaurar la ultraderecha mexicana, al mejor estilo de Juan Nepomuceno, prefiere beneficiar a un extranjero, pero conservar sus mezquinos privilegios.
Pero México no está solo, mas aún, encabeza una defensa digna de la independencia de Latinoamérica, pues el objetivo de la oligarquía extranjera, no es sólo México, es toda América Latina donde sienten que han perdido terreno como en Estados Unidos con la salida de Donald Trump y el inminente regreso de Lula Da silva por el mal gobierno e inhumano de Bolsonaro en Brasil.
Por ello es que la Organización de Estados Americanos y su dirigente Luis Leonardo Almagro Lemes, desataron una oleada de críticas al Gobierno mexicano y a su vez, los gobiernos de L.A., se reorganizan en la Celac.
Hasta ahora, ninguna de esas estrategias les ha dado los resultados esperados y la opción ha sido recurrir al ataque verbal y vulgar, pero, en especial, el ataque a la esposa del presidente de la República, demuestra la proclividad invencible hacia la misoginia y ello habla de la calidad moral y psiquiátrica de quienes atacan.